Joseph Cáceres

Juana Pineda sólo había vivido 18 años y su expareja Roelin Matos, 21 cuando este decidió quitarle la vida de tres disparos y luego suicidarse, en uno de los casos más recientes de feminicidio-suicidio ocurridos de este año.
La diferencia con otros casos es que éste siguió un patrón que está llamando la atención de los expertos: en algunos de los escenarios donde estuvieron hombres agresivos antes de cometer un feminicidio abundaba el alcohol y se percibía algún tipo de música.
Si la música permite expresar sentimientos, circunstancias, pensamientos o ideas y es capaz de hacer que quien la escuche se sienta identificado o recuerde algún momento de su vida que altere sus emociones, entonces hay un problema.

“Una canción con contenido negativo puede influir en las emociones de una persona”
José Miguel Gómez, psiquiatra

El psiquiatra José Miguel Gómez explica que una canción con contenido negativo puede influir en las emociones de una persona que, si es violenta o colérica puede cambiar su estructura de pensamiento y hacerlo más agresivo.
En lo que va de año, trece mujeres han sido asesinadas por sus exparejas en distintos lugares del país. Muchas de estas víctimas habían aguantado maltratos físicos y verbales por parte de sus agresores desde mucho tiempo antes de su muerte.
El psicólogo clínico y  director del Centro de Intervención Conductual para hombres agresores de la Fiscalía, Luis Vergés, explicó que si una persona es violenta cualquier cosa puede ser una excusa para justificar esta conducta, y que el alcohol y el contenido de una música que invita a la violencia se convierten en un factor detonante.
Aclaró que el contenido de una canción no es la causa de la violencia ni del feminicidio, sino que la droga, alcohol, discusión, y el contenido musical, son factores detonantes que, cuando una persona ya está predispuesta por su mentalidad violenta, aumenta la posibilidad de una explosión. 
“Mientras más detonantes, más posibilidad de la explosión, si ya el hombre está dependiente emocionalmente de una mujer, la mujer decide terminar la relación, él entra en un estado de semiangustia, y si en ese momento escucha una música cuyo contenido justifica la violencia en contra de la mujer eso podría ser un detonante”, explicó el experto.

Contenido violento
En canciones de artistas dominicanos abunda un contenido violento y machista que cataloga como objetos sexuales a las mujeres.
Muchas canciones, principalmente bachatas, hacen honor al llamado “género del amargue”, por las letras de desamor, soledad e infidelidades.
La mayoría de los casos de muertes registradas se relacionan a problemas de relaciones de pareja, divorcios o historiales de violencia física.
El psiquiatra José Miguel Gómez sostiene que una persona que tiene mal manejo de la ira o trastorno de control de los impulsos, o personas que tienen reacciones explosivas, es decir coléricos, son violentas porque tienen  actitudes emocionales negativas y un sistema de creencias de pensamientos y comportamientos violentos.
El experto explica que cuando estas personas escuchan una música que tenga mensajes negativos, este contenido va a influir en sus emociones.
“Aquí hay un tipo de música de contenido melancólico, amargue que tiene que ver con violencia de género donde incita la música, condiciona mentalmente y da el mensaje a través de la cultura que con las mujeres hay que ‘darle para bajo’, hay que tener ‘siete locas en una piscina’, ‘como yo estoy a cualquiera le doy’; ese tipo de mensajes de drogas, alcoholismo, celos, maltratos y abusos, tienen un contenido ideológico negativo que fomenta la violencia de género”, expresó el psiquiatra 
Contenido de canciones de más de 30 artistas dominicanos revisadas para la realización de este reportaje hacen mención a lo vulgar, morboso, a la violencia o al desamor.  En el  género urbano es donde más abunda el contenido violento y sexual, sobre todo en los cantantes masculinos. Sin embargo este estilo también es utilizado por intérpretes femeninas, como La Materialista, Milka y Melymel. Un ejemplo es la canción “Chuléame” de La Materialista.

En cuanto a violencia, la canción “Escucho cosas” de Black Point plantea: “No me dejo mete presión, ningún cuero va venderme por sentimiento ni por pasión, ningún pana va matarme por dinero ni por traición”, dice.
En el género de la bachata, el “amargue” producto de un abandono es la principal inspiración demostrada en sus creaciones. Estas canciones pueden ser detonantes para personas predispuestas en pensamientos negativos.
Un ejemplo de esto son canciones interpretadas por cantantes como Luis Segura, (Cariñito de mi vida, Corazón de acero, Traicionera) Teodoro Reyes (Cerveza y romo), Antony Santos (Amor total con una puñalada en el corazón, Anda mátame), Zacarías Ferreiras (Te lo pido a gritos, Me ilusioné, El triste, Que será de mi vida), Joel Santos (Ayer pedí)  y Frank Reyes (Con el amor no se juega).
Otros artistas cuyas letras denotan contenido violento, sexual y machista son Shelow Shaq, Don Miguelo, Doble T y El Crok, Villano Sam, y Mozart La Para.
3 ejes claves
1)) Incidencia a la violencia
Una canción con contenido negativo puede influir en las emociones de una persona, que si es violenta o colérica puede cambiar su estructura de pensamiento y tornarse más agresivo, según el psiquiatra José Miguel Gómez. 
2)) Contenido negativo
Las letras de canciones de más de 30 artistas dominicanos revisadas para este reportaje hacen mención a lo vulgar, morboso, a la violencia, mientras otras al desamor. En el género urbano es donde más abunda el contenido violento y sexual sobre todo en los cantantes masculinos. 
3)) Difusión del mensaje
El director del Centro de Intervención Conductual para hombres agresores de la Fiscalía, Luis Vergés, considera que los medios de comunicación deben tomar en consideración cualquier mensaje que invite a justificar la violencia en contra de la mujer, no solo músical, sino todo lo que incite a este hecho.
[ ENTREVISTA ] INCENTIVAR VALORES
“Se puede componer música sin caer en lo vulgar”
“Se puede hacer música fomentada en valores, se puede hablar de las condiciones de la sociedad sin necesidad de caer en lo vulgar”, considera Ramón Emilio Candelario Reyes, ganador del segundo lugar del concurso Música Urbana por los Valores, una iniciativa impulsada por la Vicepresidencia de la República y el Ministerio de la Juventud para estimular y proyectar el desarrollo de ese género musical inspirado en valores.
Este joven de 25 años, estudiante de ingeniería industrial, y egresado de la Escuela Nacional de Arte Dramático, dijo que el rap hoy en día se ha deformado, pues su creación se basaba en contar luchas y leyendas de los pueblos.
“La música despierta las emociones, si se construye una música con buenas letras va a incidir de buena manera en las personas, la música edifica”, expresó.
Dijo que, a pesar de crecer en un sector con precariedades, Las Palmas de Herrera, no se ha centrado en permanecer en esa condición sino en hacer la diferencia.
“Yo creo en aquellas cosas que edifiquen, yo vengo del mismo lugar, del mismo hoyo, del mismo barrio donde hay precariedades, y demostrando que se puede tener una visión diferente”, sostuvo. 
Consideró que la Comisión de Espectáculos Públicos debería censurar y hacer más campaña como la que realizó la Vicepresidenta y el Ministerio de la Juventud.
“Sonríe dominicano, muéstrales tu cualidad, la vida es un privilegio que no hay que desperdiciar, si siembras buenos valores cosechas honestidad, serás un hombre de bien que sirva a la sociedad”, es una estrofa de la canción Cultivando Valores con la que ganó el segundo lugar.(Kateryne Luna/Listín Diario)