viernes, 21 de diciembre de 2007

Boxeadores del Arte

Las figuras del arte y los famosos deben cultivar la paciencia junto con la decencia.
No deben dejarse provocar ni incurrir en efervescencias que desnaturalicen su imagen.
El Toro, el Chino Estrella, Venya Çarolina, Evelina García deben hacerse el propósito en el nuevo año de no pelear con nadie, ni de andar por ahí ofeciendo galletones trompadas y halones de moños, como a veces ha sucedido con algunos de ellos.
Nadie verá, por ejemplo, a un Juan Luis Guerra discutiendo ni peleando con nadie, aunque lo ataquen o provoquen.
Igual ocurre con Fernando Villalona, un ser capaz de soportar con estoicismo las más fiuertes críticas y ataques sin rechistar ni inmutarse.
En el caso de Juan Luis hay hasta una anécdota que pone de manifiesto su equilibrio inadmovible.
Sucedió que en uno de esos viajes internacionales que realizaba con 4-40 coincidió en la cabina de primera clase del avión con el boxeador Mike Tyson cuando el campeón de boxeo estaba en pleno apogeo.
Tyson tiene la fama de abusador y rebusero, lo cual como se sabe le ha traído mchos problemas judiciales.
Pues bien, el boxeador se volvió loco cuando vió a Nora, la esposa de Juan Luis, pues al tipo le gustan las rubias altas, así como ella... negro al fin.
El caso es que no disimuló miradas, tarjetitas, y se mantuvo fuñendo durante el viaje.
Dicen que Juan Luis se hacía el loco y solo miraba por el rabillo del ojo tras sus gafas oscuras.
Ignoró a Mike Tyson y su actitud provocativa hacia su mujer.
Todavía existe la interrogante de si lo hizo por prudencia, o para no tener que “masacrar” en pleno vuelo al campeón mundial de boxeo.
Y ustedes qué creen?




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NIURKA BAEZ,
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