DOS IMAGENES DE "THRILLER"

Michael Jackson y Madonna son sin duda alguna las más emblemáticas figuras de la canción y de la música popular de norteamerica.
Dos íconos convertidos en leyendas vivas de la música y el canto, cada uno con su estilo tan singular y particular. Tan irreverentes, atrevidos, controversiales.
Figuras que el mercado ha asumido y encumbrado a los niveles más altos de popularidad que se puedan concebir, estableciendo records en venta de discos y taquilla que dificilmente pueda alguien superar.
Sorprende ver, sin embargo, cómo estos seres que parecían haber escapado de los designios de la naturaleza y de vida, erigidos en ídolos, inmortalizados por la gente muestran de repente su cara oculta y desconocida.
Penosa la imagen de Michael Jackson paseando en silla de rueda, con la cara oculta con una mascarilla para no contaminarse por el polvo.
Aquí en la calle lo confundirían con alguno de esos inválidos en silla de rueda que algunos alquilan para pedir dinero en las esquinas.
Perdonenme si le parezco muy cruel, pero es que la imagen es muy chocante, tratándose de una figura como Michael Jackson.
Lastimosa la fotografía de Madonna desmejorada, con cara de drogadicta, su boquita de chuflai y aspecto de “gallina matada a escobazos”.
Es la viva estampa de como un artista nunca se debería dejar de ver.
Figuras cuyos poster sugestivos están en millones de paredes de habitaciones de adolescentes de todo el mundo, no pueden de repente proyectarse con tan infeliz aspecto.
Eso me recuerda la ocasión en que aquí se decidió cambiar la imagen que se usaba en las monedas y en las papeletas que llevaban la figura de Juan Pablo Duarte.
Erroneamente se colocaba una imagen del Juan Pablo Duarte envejeciente, de sus últimos años, que no generaba la idea de valor, de patriotismo, de paladin de la libertad que se necesitaba sembrar de el en la juventud.
Se tomó la atinada decisión de cambiar la imagen de viejito del patricio por una de su época de madurez, gallardo, altivo, acorde con los valores que se ameritaba sembrar y proyectar en la niñez, la juventud y los estudiantes.
Igual desplome ocurrió entre los admiradores de una megadiva, que luego de alimentar su fantasía al verla en poster y en la televisión glamorosa, sexi, provocativa, no podían concebir que era la misma que una mañana estaba en el colmado de la esquina de su casa con la cabeza llena de rolos, comprando un paquetico de café, un huevo y un plátano.
Pero volviendo a Madonna y Michael Jackson, aunque ambos tienen planeadas giras y presentaciones como siempre han acostumbrado al público, el hecho de que se produzca esa coincidencia de dejarse ver y fotografiar con una imagen tan deprimente deja mucho que pensar.
Será que estos artistas se encaminan hacia el punto de no regreso?.
O es ello un acto de extrema sinceridad consigo mismos y con su público, tratando de mostrar su lado humano, no maquillado, sin aceites ni esteticismos?
Qué tanto de desafío puede haber, pues de igual manera pudiera interpretarse que aún mostrándose así nadie hay que pueda aprovecharse y tratar de ocupar su lugar?,
Son varias las lecturas que se le pueden dar a este caso.
En los insondables laberintos de la psiquis y del comportamiento humano hay a veces signos indescifrables, códigos ariticulados de manera que no es fácil accesar a ellos.
No hay que olvidar, empero, que lo importante es lo que subyace debajo de las apariencias.

FOTOS;
1.- Michael Jackson
2.- Madonna demacrada y Madonna normal
3.- Madonna y su hija