UN GANCHO...Y NO DE ROPA.

En esta farándula lo que más abunda son los bellacos que viven haciendo bromas y tomándole el pelo a cualquiera.
Nadie se les salva, ni siquiera el maestro Ramón Orlando...
En un encuentro de prensa en que se iba a anunciar una actividad musical, estaba presente el hermano Ramón
En el barcito de Brugal que llevan a las ruedas de prensa estaban sirviendo tragos, y un tunante le dice a Ramón:
-!Maestro, quiere un trago!.
-No...tu sabes que yo estoy entregado al señor y no tomo bebidas alcoholicas.
-Desea entonces un refresco?- le insiste.
-Si...un refresquito si, gloria a Dios!.
El tipo va a buscarle el refresco y se lo echan en un vaso plástico con un letrero de Brugal.
Un fotógrafo que estaba enterado de la trama, preparó su cámara con disimulo para capturar a Ramón con su vaso de refresco, pero con el letrero de Brugal iban a creer que era ron.
Cuando le pasaron el vaso a Ramón que hizo ademán de tomarlo, se dio cuenta de que decía Brugal, y como si hubiera tenido un spring en el brazo, lo retiró rapidamente y dijo:
-!Eso es obra del demonio que quiere tentarme, aleluya, hermano, gloria a Dios. Pero el señor me protege, Dios, aleluya!, gloria a Dios!. El me aleja de los vicios...el me protege de las tentaciones del diablo. alabado sea!...
Duro como media hora haciendo invocaciones. Hubo que aguantarle después una larga charla sobre como el diablo tienta a la gente.
Por estar queriendole hacer una broma a Ramón, tuvieron que aguantar una larga charla cristiana, donde nadie se le podía ir.

Y EL NOMBRAMIENTO DE RAMON?

A propósito de Ramón, como han estado nombrando a todos los artistas que apoyaron al presidente Leonel Fernández para su reelección, el maestro Ramón estaría esperando el suyo, sobre todo luego de aquello de “no hay nadie más para sustituirte”.
Lo único es que después del cargo “honorífico” que le dieron a Peña Suazo, que lo “apearon’’, después que tanto hizo para que Leonel siguiera “subido en el palo”, el maestro Ramón estaría esquivo.
El está claro de que “no solo de pan vive el hombre”.
No le caería mal un cargo, pero no quiere que sea un “cargo de conciencia”...


FOTO:
Ramón Orlando