ARTE NACIONAL
Por Joseph Cáceres
UN ELEFANTE BLANCO
Artísticamente surgí y crecí en Bellas Artes, en cuya escuela de Arte Dramático me gradué en actuación a finales de los años sesenta, con los profesores Jesús Lizán, Salvador Pérez Martínez, Marino Hoepelman, Niní Germán, y las profesoras Lucía y Margarita.
De igual manera en un atelier de la azotea operaba el local del Teatro Estudio, la compañía de teatro experimental que dirigía y de la cual formaban parte Geovanny Cruz, Etzel Báez y otras figuras notables que en esa época eran actores en ciernes.
Me ví envuelto en un problema con las autoridades del teatro por una entrevista que me hicieron en la revista Ahora! donde decía que Bellas Artes era un elefante blanco.
Eso bastó para que me quitaran el local que ocupaba y que con tanto sacrificio remodelamos, con parte de las ganancias del montaje de la obra "Dos Viejos Pánicos"', de Virgilio Piñera, protagonizada por Geovanny Cruz y Nadine Nader, y que presentamos con gran exito en el auditorio de Bellas Artes, en una época en que todavía no existía el Teatro Nacional, y era esa la principal sala de espectáculos del país.
Me quitaron el local por la fuerza y fue cuando me acogieron en la Universidad Autónoma permitiéndonos un salón que también remodelamos en el edificio de la facultad de Odontología donde operamos adscritos al Movimiento Cultural Universitario.
Fue la época en que presenté por todo el país mi obra Tataibá, ganadora del premio como pieza teatral del año en la selección anual del desaparecideo diario vespertino Última Hora.
Y el tiempo nos dió la razón...Bellas Artes no fue un elefante blanco, sino un elefantazo.
Llegó al extremo de que sus áreas fueron ocupadas por dependencias de la Secretaría de Educación, y también fueron utilizadas como depósitos de materiales y muebles viejos desvirtuando de esa manera la tarea esencial de la dependencia.
Como elefante al fin, tuvo que cargar con todos los ''cachibaches y desperdicios'' del edificio contiguo de la Secretaría de Educación.
Y así se mantuvo en un extenso y oprobioso letargo.
UN ELEFANTE GRIS...
Ahora el gobierno ha hecho una cuantiosa inversión para remodelar el local.
Se ha procedido a una intervención como nunca se había hecho en esa edificación de arquitectura neoclásica, lo cual pone de manifiesto el interés del presidente Leonel Fernández en darle realce y apoyo a las artes clásicas en sus diferentes manifestaciones.
Si se compara la sala de Bellas Artes con la del Teatro Nacional, se puede decir de la misma que es un local boutique, así como hay tiendas y hoteles boutiques, pequeño, pero cómodo, vistoso y lujoso.
Y al igual que antes, vuelvo a plantear la preocupación de si después de tan cuantiosa inversión en la remodelación Bellas Artes seguirá siendo un elefante...
Quizas no blanco, pero gris, que es peor, pues es un color que oculta más la tinta y los embarres.
Ello a propósito de que en la entidad hay un mal secular que nunca ha podido ser alcanzado por remodelaciones ni "body tranformations", por usar un término muy usual entre las megadivas.
La mentalidad de empleados públicos que tiene la mayoría de los actores de su cuadro teatral que se preocupan solo por cobrar su sueldo cada mes, mientras se dedican a trabajar en otras áreas.
Y cuando se les pregunta por qué no trabajan y no montan obras teatrales, le salen con el alegato de que devengan muy bajos salarios...
Eso por solo citar el caso de una dependencia de la entidad, porque hay otras iguales o peores.
Nada se hace con remodelar el local, para que ahora vengan los empresarios a montar shows de artistas populares y a pagar una bagatela, libre de impuestos por demás.
Se necesita implementar un verdadero plan de expansión cultural en esa dependencia
Si no hay una transformación en el personal artístico y se pone a trabajar a tanta gente vaga, Bellas Artes va a continuar en lo mismo.
Lo dice alguien la conoce, porque nació y creció artísticamente entre sus vetustas paredes.
josephcaceres89@msn.com
FOTO:
1.- Remodelado Palacio de Bellas Artes
2.- Los periódicos desplegaban en amplios titulares
la represión a que fui sometido durante los 12 años
del gobierno de Balaguer. Fui un autor prohibido dizque
por subversivo.
3.- Aclaración de que la obra que la policía había prohibido
fue Tataibá 1 no Tataibá ll
Una vez tuve la oportunidad de visitar bellas artes en sus fases finales, antes de la remodelacion, y ver realmente el "cuchitrin" en el k que se convirtio nuestra Escuela Nacional de Arte fue muy penoso, el aire de la sala en la k estabamos no funcionaba las cortinas como raigadas un desastre sin exagerar.
ResponderEliminarEso es criterio de hacer las cosas, un millon de suerte señor JC y ojala su excelente propuesta llegara mas alla de este blog.... ojala..
A llovido mucho amigo Joseph, ofrezcome, yo recuerdo un domingo mientras veía El Gordo de la Semana que entró un viejito bien cubierto y disfrazado haciendo un fragmento de una obra teatral, y todo el mundo curioso por saber quien era el actor pues estaba bien camuflajeado y para sorpresa de todos era nada mas y nada menos que Joseph Caceres. Me quedé de una pieza, eso fue excelente porqué así se juzgaba la actuación sin prejuzgar al actor, ojalá pueda narrar un día esa experiencia con lujo de detalles, contando la impresión del publico. Espero ese relato Don Joseph.
ResponderEliminarAlpha
Ah, otra cosa, por favor que le busquen otro lugar a los carros públicos o taxis que se parqueaban o parquean ahí.
ResponderEliminarAlpha