domingo, 28 de diciembre de 2008

UN NEFASTO DESIGNIO COLECTIVO



Eran las 11 de la noche el pasado viernes cuando el cantante Anthony Rios  le comunicó a su manager Raphy D'Oleo desde su residencia que no se sentía bien.
Y el Maunaloa estaba lleno de gente esperando su show Vellonera.
D'Oleo acordó con él juntarse en la clínica Independencia, cercana al Maunaloa, para que lo viera un médico.
Tras una glicemina y toma de presión arterial, se determinó que todo estaba normal, por lo que el artista se dirigió a realizar su show.
Sin embargo, desde el mismo inicio comenzó una sudoración anormal, y hasta se vió precisado a sentarse para poder cantar, algo que nunca hace Anthnoy.
A la cuarta canción hubo que suspender el concierto, y salir con él a procurar asistencia médica urgente.
Una úlcera estomocal había hecho erupción lo que conllevó su internamiento en Cedimat, en la Plaza de la Salud donde ha estado recibiendo atención médica.
Al público se le ha prometido reponer el concierto el próximo sábado. 
Los centenares de personas presentes aceptaron la entrega de sus boletas para ir de nuevo al Maunaloa ese día.
Solo a 22 personas se le devolvió el dinero porque residen fuera del país y tienen que retornar antes de esa fecha.
Mientras tanto, el año cierra complicado en materia de salud para la gente del medio, tomando en cuenta la situación de Yaqui, Socorro Castellanos, Luisito Martí, José Guillermo Sued.
El año pasado fueron Freddy Bera y Boruga.
Toda una generación de figuras del arte que no han podido escapar a problemas de salud, como si se hubiese establecido un nefasto designio colectivo.

FOTO:
Anthony Rios

1 comentario:

  1. Que te mejores pronto y por favor, cuida tu cuerpo...Saludos desde New York...

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NIURKA BAEZ,
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