LAS COSAS DEL CHINO ESTRELLA
El Chino Estrella es uno de esos personajes peculiares del ambiente artístico, que se caracteriza siempre por ser muy solidario con sus amigos, pero que como muchos saben, tiene sus momentos de locura, sobre todo luego de una tanda de libaciones.
Hoy quiero recordar la ocasión en que me extendió una invitación a compartir con él en un centro del sector de Villa Juana.
El Chino siempre ha sido orgulloso de su barrio en Santo Domingo y por ello sus invitaciones siempre giraban en torno a locales del sector, entre ellos el comedor Marisol de la María Montez, donde siempre terminaban las noches festivas frente a un caliente caldo.
-Te quiero presentar a una amiga que he invitado que de seguro te va a encantar- me dijo.
-Cuidado Chino si es un gancho el que me quieres tirar. Quién es la tipa?- le pregunto.
- Es una amiga, tú veras...de seguro te va a gustar. Está buenísima.
Con esa recomendación no me quedó más remedio que aceptar la invitación.
Bueno pues a la hora acordada llegué al lugar donde estaba el Chino, y efectivamente estaba acompañado de una muchacha con la belleza de la mujer criolla, de un cuerpo espectacular.
"La pegué'', pensé mientras me sentaba frente a una mesa donde había un litro de Chivas.
El Chino me presentó a la muchacha y de inmediato iniciamos una amena conversación.
Tragos vienen y tragos van. Al rato ya estaba yo de lo más acaramelado con la muchacha, tomados de manos y echándole el brazo de manera muy confianzuda.
Y el Chino aceleraba su trago, contento de haber propiciado aquel feliz encuentro.
Tragos vienen y tragos van... me iba poniendo sabroso y contentón.
Me sentía feliz disfrutando del momento.
Pero al rato noté que El Chino no estaba tan contento como al principio.
A medida que ingeria alcohol iba disminuyendo su entusiasmo. No hacía chistes, no se reía ni conversaba como lo había estado haciendo.
Mientras pensaba en ese cambio abrazaba a la chica.
El Chino pidió permiso para ir al baño y noté que hasta se llevó su vaso para seguir bebiendo.
Yo seguía en romance y no me daba por nadie.
Al rato volvió el Chino a la mesa con una mirada extraña y exclamó
-Oh! Joseph, y que tú haces con mi novia?. !Explícame lo que estás haciendo con mi novia!.
-Como que hago con tu novia, tú me llamaste y me la presentaste como una amiga?.
-Eres un traicionero! Dizque amigo mío!. Nunca pensé que tú me ibas a hacer eso.
-Pero tú debes estar relajando, Chino?- le dije, sorprendido.
-Relajando yo?...noooo! . Es en serio, traicionero. Asi son los amigos, unos traidores. Cómo me has hecho esto?. Oh no!.
Pude notar que la muchacha también estaba sorprendida.
-Pero te volviste loco, Chino?. Y es loco que estás!!!
-Cómo te atreves a salir con mi novia!. Como te atreves- insistía el Chino con cara compungida y lloroso.
Para no cansarles el cuento, tuve que salir huyendo de alli y dejar al Chino con la mujer.
Al día siguiente pensaba en la locura del Chino la noche anterior, mientras me hacía el propósito de no volver a aceptarle ninguna invitación que me hiciera.
De repente sonó el teléfono. Lo contesto, y era el Chino Estrella.
-Hey, Joseph...cómo te fue anoche con la muchacha que te presenté?. Verdad que está buena...?. Te la llevaste? No te puedes quejar de los levantes que te consigo...Te voy a presentar otra.
FOTO: Chino Estrella
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Ofrezcome pero que cosas relatas aqui Joseph. jaja se paso el Chino.
ResponderEliminarYo lo nozco y es verdad, el chino se transforma y siempre dice que sus amigos lo traicionan y se pone a llorar cuando esta bebiendo.
ResponderEliminarLaq verdad es que este Joseph tiene historias.
ResponderEliminarLa verdad que ha vivido su vida.
joseph, por favor. Cuenta la anecdota de cuando el chino Estrella fue al teatro nacional y no lo dejaron entrar porque llego tarde.
ResponderEliminarY le reclamaba al portero que el tenia una mesa reservada. Esa anecdota la hizo victor roque.
Yo se que tu la sabes, porque cuando victor roque te la contaba yo estaba ahi en el restaurante Mirage en Dickman hace muchos años.
A mi se me hace que cuando el chino se fue para el bano se dio su par de fuetazos tu sabes por donde .
ResponderEliminardicen que el alcohol destruye las neuronas parece ser el caso del chino cuando dobla el codo, o el romo lo vuelve loco realmente, yo lo que se es que te daño el maiz tu estabas en punto de caramelo, pa llevala pa arriba y dale pa lo tuti, y el chino te pasmo el asunto ese, te fuiste a pique joseph.
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