UN ANALISIS

A propósito de todas las opiniones que ha provocado la publicación aquí de la manera en que vive Georgina Duluc, veo que resultaría interesante volver a tratar la que quizás es la parte más importante de la trayectoria de esta hermosa y polémica mujer criolla.

Empezaré por decir que nunca se me olvida la ocasión en que veía una entrevista que le hacían a Georgina en un programa de la televisión local, donde ella decía que este país "le quedaba pequeño", y que por esa razón había decidido irse a Miami, donde tenía una oferta para trabajar en el programa Sábado Gigante de Don Francisco.

Era evidente que estaba desbordada por deseos  insatisfechos y anhelos no alcanzados.

Confieso que al oírla hablar así me dio mucha pena, porque ella venía de haber tenido aquí "todas las oportunidades"', incluyendo las de Baninter, que le abrió un programa en Telecentro, y que además le había auspiciado todas las campañas  promocionales del más alto nivel, con el evidente interés de ''pegarla".

Una de ellas fue llevarla a los Estados Unidos a ver el concierto de Luis Miguel, y después cuando el artista vino al país lo vincularon a ella en un supuesto romance, que fue ampliamente publicitado por diferentes medios, incluyendo los del banco. 

La estaban proyectando como una mujer arrogante y prepotente, y eso es algo que aquí no perdona la gente.

Para mí fue un mal manejo de imagen, que con el tiempo le iba a pasar factura, como se ha podido ver, que solo hace sacar la cabeza para que de inmediato ''le disparen''.

La Duluc tiene ''francotiradores'' apostados en lugares muy estratégicos  dispuestos a matar, de los cuales ella por lo visto no ha sabido cuidarse a veces, y eso hasta me da pena.

Pero volviendo a la entrevista, al escucharla decir que este país le queda chiquito, sin haber aún agotado "todas las posibilidades",  pensé que estaba siendo mal asesorada, o que se había envanecido abrevando las mieles de la abundancia, del poder mediático y de los recursos financieros ociosos siempre dispuestos al entretenimiento que propiciaban los banqueros, hoy presos, algunos de ellos.

''Ojalá que le vaya bonito, y que no tenga que volver al paisito'', le comenté a Greidy,  mi compañera ''incondicional" de aquellos tiempos.

La Georgina se fue a "triunfar" con Don Francisco, pero su permanencia en el programa duró menos que la "independencia efímera" de mi antepasado Núñez de Cáceres, porque como muchos saben, en Sábado Gigante se llevan a veces figuras alternativas por cortas temporadas, 

como una manera de ir introduciendo elementos diferentes al programa, sin que ello necesariamente signifique compromiso alguno de dejarlos fijos. Eso lo saben hasta los "chinos de Bonao"', no así Georgina Duluc ni sus asesores en aquellos tiempos.

Y "tú qué comes, que adivinas?''. Al poco tiempo

 la vimos regresar al país, de lo más calladita, sin recoger las palabras en las que renegaba del ''paisito'' que le quedaba chiquito, ''pero tupío'', digo yo.

A partir de ahí se inició con ella el letargo que la ha mantenido fuera de la televisión.

Hasta que llegó la premiación Casandra del año pasado, en que fue vetada como una de las posibles presentadoras. En Acroarte no dejaron que la producción del Casandra la escogiera como una de sus conductoras.

En esa ocasión salió en su defensa el diseñador de modas Jorge Diep, quien dio señales de donde vienen algunas actitudes de la beldad, cuando le recomendó a Georgina que "recogiera sus maletas y se marchara a otro país donde su talento fuera verdaderamente tomado en cuenta.

Y agregó: "Es lamentable que Georgina naciera en nuestro país donde no se reconoce el talento por encima de sus prejuicios sociales. Acaso las divas mexicanas exhiben una conducta intachable.? Los mexicanos, los argentinos o los españoles donde existen mujeres de la talla de la Duluc, no les cuestionan su comportamiento moral a las actrices y presentadoras. Se le ve su 

talento y belleza ante todo y de eso la Duluc tiene de 

más"', dijo Diep en Masvip el 2 de marzo del año pasado, pero más temprano, el 12 de febrero, había dicho ya que "Sin Georgina Duluc no Hay Alfombra Dorada''.

Con esas declaraciones, Jorge Diep enseñó ''hasta el refajo''...no más palabras, magistrado.

La reaparición de Georgina y sus declaraciones ''desenfadadas" en el programa Divertido la han puesto de nuevo en ''la cancha" y de inmediato ya la vemos en juego, con "jugadores"' que parecen no estar dispuestos a dejar que gane en el terreno.

Y está teniendo de nuevo presencia en el medio, a propósito de la salida al aire de un programa junto a Zoila Luna, otra figura femenina polémica del medio, que al juntarse con Georgina ha levantado muchas expectativas debido a la confluencia de temperamentos disimiles, difíciles, tan "die hart" que se dan en ese proyecto.

Está por verse qué tanto pueden la dama ''de seda'' (entre comillas) y la ''dama de hierro'' (con comillas y todo), conciliar sus egos, intereses, caracteres, temperamentos, para salir a flote frente a un medio que evidentemente en gran medida le es adverso.

Cuál de las dos más controversial, lo cual puede que sea una ventaja pero también una desventaja.

Probablemente pronto veremos de qué lado se inclina el pulso.

FOTOS:

1 y 2.- Georgina Duluc

3.- Zoila Luna