Joseph Cáceres

LOS PICAPOLLO DE LOS CHINOS

BARATOS Y ABUNDANTES, PERO...

Se ha diseminado como una veradera ''plaga'' los establecimientos de comida rápida que operan los chinos con el nombre de ''expressos''.

Los chinitos le han dado en la ''madre'' a Pollos Victorina y a los Kentucky Fried Chicken, pues el pueblo prefiere sus servicios de hasta 5 piezas de pollo frito y un ''viaje'' de tostones o ''papa frita'', por un promedio de 125 pesos, mientras que los señalados establecimientos cobran el doble y dan menos.

La gente ''resuelve'' con los picapollos de los chinitos, y han tenido tanto exito que dondequiera hay un ''expresso''.

Sorprende que establecimientos donde se pagan luz, se cocinan los mismos pollos, que sirven más y venden más barato, sin dejar de tener beneficios.

Esa fórmula no falla con los chinitos, mientras aqui abusan con los precios de esos pollos cuya materia prima compran barata con descuentos especiales por volúmen.

Lo único malo es que en contra del servicio de los chinos se maneja el tema de la higiene, el cual no deja de ser una legítima preocupación.

Contra los asiáticos se ha manejado una campaña de descrédito que a veces llega a niveles asombrosos, que es motivo de chistes, y relajos derivados de creencias en el sentido de que segun dicen nunca se ve los velatorios ni cortejos fúnebres de los chinos porque hacen ''shop suey'' con los muertos. Y tan buenos que son con su salsita china!

Tambien se habla de que los perros callejeros viralata nunca merodean los restaurantes de los chinos porque no tienen nada que buscar en los zafacones porque todos los desperdicios y las sobras los convierten en chofán.

Son provebiales los cuentos con los chinos, aunque en honor a la verdad, no todos deben ser medidos con la misma vara. La comida china es fabulosa, y hay lugares donde se mantienen las debidas normas de higiene, precisamente huyendo de la mala fama que le han dado.

Lo grande del caso, es que mientras algunos se mofan y hacen trizas la higiene de los chinos, lo que sucede aquí en algunos restaurantes es una barbaridad y nadie se entera ni dice nada.

Es muy bueno tirarle piedras al tejado de los chinos, para desviar la atención del techo de cristal que aquí muchos tienen.

Pena y verguenza da entrar a la cocina de algunos restaurantes y ver los pisos de pocilga, las ollas, los utensilios, la vestimenta, y la higiene de algunos cocineros manipulando los alimentos sin guantes, con las manos sucias, rascándose hasta ''las bolsas.''

En otros tiempos se hacían inspecciones y se acreditaba la cocina de los restaurantes, pero ya no.

Cuando se suele hacer una inspección, los dueños de esos lugares no tienen problemas, pues no es raro encontrar a los inspectores ''hartándose'' en los sitios, con un buen ''sobre'' en los bolsillos.

Esos restaurantes le sirven basura a los clientes, a precios bien elevados, porque tienen la fama de ser muy ''chic''.

Y claro, lo de la falta de higiene, la desvian hacia los chinos....