martes, 29 de junio de 2010

LA NOTICIA Y SU PESPUNTE



A Pedro Miguel Mercedes, el nieto del recien fallecido chef Mike Mercedes, fue a quien le tocó hoy llevar a su abuelo en estado agónico para que recibiera asistencia médica.
El joven, de 24 años, cuenta que estaba durmiendo cuando una persona que labora en la casa de su abuelo le dijo que éste no se veía bien. “Me dijo, el viejo no se ve bien, parece que tiene problemas para respirar y yo lo veo muy pálido”.
Explicó que cuando acudió a ver a su pariente también lo notó sofocado y pálido por lo que decidió llevarlo al centro de salud más cercano que es el Centro  Médico Real.
“En emergencia, una joven lo chequeó y me dijo que él estaba bien. Le respondí que lo veía con las pupilas dilatadas y muy pálido y le pregunté si no le podían dar algo, atenderlo, antes de llevarlo al hospital de las Fuerzas Armadas donde está su médico. Ella me dijo que era mejor l levarlo a su médico. Que sí que él estaba un poco deshidratado pero que ella lo veía bien. Nos fuimos y en el camino mi abuelo se murió antes de llegar al hospital”, contó el joven a listindiario.com.


Estaba tan bien, según el diagnóstico de quien lo vio en el Centro Médico Real, que desde que salió de allí falleció en el trayecto hacia el hospital de las Fuerzas Armadas.
Dios libre a quien le toque ser llevado al área de emergencia de ciertas clínicas atendidas por ciertos mediquitos de pacotilla, o aprendices que no saben lo que tienen entre manos.
En las emergencias de ciertas clínicas privadas lo que hay son médicos que solo sirven para curar heriditas con ‘’curitas’’, no más de ahí.
Pero tampoco piensen que el llamado hospital de las Fuerzas Armadas es gran cosa.
Tuve la experiencia allí de que me dejaran morir a mi padre, oficial retirado del Ejército, sencillamente por una actitud negligente de los facultativos que no intervinieron a tiempo, pese a la gravedad del problema que le afectaba.
Algunas clínicas privadas, y hospitales estatales, son la misma mierda.


2 comentarios:

  1. El señor que trabaja en la casa del fenecido es más médico que la jóven que lo atendió en el centro de salud.

    A la joven que lo atendió que vuelva a la universidad para que aprenda a reconocer los síntomas cuando una persona está agonizando.
    ¡Ofrezcome!

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  2. ES UN CASO LAMENTABLE, OJALA NO VUELVA A OCURRIR CON OTRO PACIENTE,DEBEN TOMARSE LAS MEDIDAS DE LUGAR, A LOS FAMILIARES QUE RECUERDEN QUE DIOS SIEMPRE ESTARA DE SU LADO.

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NIURKA BAEZ,
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