Cuando la Cervecería Presidente montó un concierto con El Jeffrey en el Kartódromo del malecón, sucedió algo que casi nadie ha comentado.
El Jeffrey entró al escenario montado en un caballo de su propiedad, y el animal se le puso bronco, se detuvo en seco, y cuando el jinete quiso controlarlo se le rompieron las riendas, y no le quedó más remedio que lanzarse del animal.
De lo contrario corría el riesgo de que, con el espanto, el equino saliera huyendo con el Jeffre encima, y quizás lo hubieran tenido que ir a buscar a Los Alcarrizos, lo que habría estropeado el concierto.
Toño Rosario, que estaba observando la transmisión por televisión, llamó a Juan Carlos jiménez para comentarle el asunto.
‘’Eso solo se ve aquí con los artistas dominicanos’’, dijo, ‘’porque cuando se va a hacer un ‘’show’’ con un caballo, es necesario entrenarlo previamente, para que no se espante cuando entre al escenario’’, afirmó Toño.
Y tiene razón, porque por más familiarizado que esté el jinete con el animal, cuando éste entra a un lugar donde hay tantas luces, bocinas, efectos de humo, por instinto tiende a ponerse esquivo y a sobresaltarse.
No es un caballo de circo, que está acostumbrado al ambiente de un escenario.
Eso que refiere Toño debería tomarlo el Jeffrey con hjumildad, a manera de ‘’clase’’, sentado en una sillita, como en una escuelita particular, para que aprenda de uno que sabe.
Porque el Kuko puede muy bien puede ser su maestro, como también del productor del concierto que tampoco tuvo previsión de lo que hay que hacer cuando se va a introducir un animal a escenario.
En una ocasión Freddy Beras metió en el estudio de Color Visión a un cocodrilo durante una transmisión de el Gordo de la Semana. Se pusieron a punchar y a embromar al cocodlrtilo, y poco faltó para que el reptil diera buena cuenta del brazo de uno, ya que le tiró una ‘’ñangada’’ .
Igual sucedió con unos pinquinos, que cuado vieron las luces, salieron disparados y hubo que ir a atraparlos en los pasillos del canal.
Es decir, que no es un invento...El manejo de animales en los espectáculos tiene sus trucos.
Y el que no los conoce, puede sufrir un chasco, como le sucedió al Jeffrey con su ‘’caballito valiente, que tiene la carga y no la siente’’.
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