Joseph Cáceres

No es lo mismo el "bello bello"
que el "vello vello"

BRENDA SANCHEZ

Mucha gente se manfiestó sorprendida con las declaraciones del locutor y comentarista de televisión Haime Thomas de que prefiere a las mujeres que no se depilen, y que mantengan intacto su vello púbico.

Con ello Haime, sin percatarse, anidaba en la mente de la gente un morbo que comprometía a su esposa, la popular presentadora de la televisión, Brenda Sánchez.

De inmediato la idea que se generó en la mente de la gente fue que Brenda no "se afeita’’, no depila sus partes pudendas.  Una especie de "a confesión de parte, relevo de pruebas’’.

Se entendió que si Haime se atrevía a hacer una revelación tan íntima, es  porque en su esposa predica con el ejemplo.

Y decimos que comprometía la imagen de Brenda, porque siendo ésta una figura pública la exponía de inmediato a un escarceo que va más allá de lo artístico, cayendo en el terreno de lo "impúdico’’ y "pecaminoso’’, connotación que los más puritanos y ortodoxos le confieren socialmente a todo lo relativo al sexo.

La pareja no debe estar ajena a los chistes que se montaron a partir de las declaraciones de marras , desde el alusivo al merengue "El Moñoñón”, hasta la caricatura grosera que unos bellacos pusieron a circular en la internet.

Son de las situaciones que la gente está al acecho, para de inmediato tomarlas como medio de entretenimiento.

Sobre todo en un pueblo como el nuestro, donde un ciclón, un virus de gripe y la desgracia de alguien importante o famoso, es caldo de cultivo para relajos, cuentos, chistes, anécdotas con lo que se alimenta la industria del "chicharacherío’’,  y el "cotilleo’’.

Y es que al que cae en la boca de la gente no lo salva nadie....

Pero bien, lo que habría que pensar es si Haime de alguna manera está influenciado por la cultura de las mexicanas "peludas y bigotonas’’, como se atrevió a decir el cantante Tiziano Ferro, ocasionando que se le armara un lío de “padre y señor mío”.

Algo que todo el que ha ido a México y ha tratado con las mexicanas sabe, pero que si lo dice alguien de fuera es considerado como ‘’una ofensa’’.

Pero es muy cierto, las mexicanas son "peludas y bigotonas’’, lo cual resulta desagradable, porque al besarlas de repente le da a usted la impresión de que  se está besando con un hombre.

Luego, lo de la presencia del vello púbico genera un problema de higiene, aparte de que provoca situaciones molestas que pueden resultar muy dolorosas, y no tengo que dar más detalles, porque todo el que no se quiera pasar de ingenuo sabe a lo que me refiero.

La mujer moderna prescinde del vello púbico, también denominado "indeseado’’ y "perturbador’’, sin dejar de reconocer el erotismo que suele generar en hombres como Haime Thomas.

Pero también vale decir que los antiguos egipcios lo eliminaban con navajas, mezcla de azúcar y cera de abejas, y que a los antiguos griegos y romanos también les gustaba ir depilados.

Imposible su presencia bajo bikinis y trajes de baño de mujeres en playas y desfiles de pasarelas.

El vello púbico está proscrito, y su indeseada presencia llega al punto de que hoy día se han creado especialistas en su tratamiento depilatorio.

Son los señores que al igual que, los ginecólogos y masajistas, tienen licencia para ver a tu mujer desnuda...

Lo que abre una interrogante que no deja de ser ociosa.

Si eres, sumamente celoso, preferiría que tu mujer conservara el vello púbico, antes que permitir que un depilador profesional te la esté "cucuteando’’ por sus partes?.