7.- Trabant (1957-1962). ¡Diablos, éste sí quera era malo! Fabricado en Alemania Oriental (la comunista para los que están flojos en geografía), algunos alegaban que estaba hecho de cartón, pero como los comunistas se atrasaron en “algunas cositas”, fue el auto más popular en su país y por 30 años invadió el bloque de países socialistas. No tenía luces direccionales y los frenos eran un problema. Para echar la gasolina y el aceite, había que levantar la capota y luego mover el carro (agitarlo) como si se tratara de una medicina que uno se fuera a beber. Para colmo, había que encargar el modelo 15 años antes a la fábrica. Para suerte de los alemanes orientales, las dos Alemania se unieron en 1989, y la historia hoy es diferente. Aunque Trabant en alemán significa “compañero viajero”, tener un Trabant debía ser peor que criar un carajito que tú sabes que no es tuyo, y que luego te salga mal agradecido el muchacho. (Orlando Holguín).
lunes, 4 de octubre de 2010
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