DOMINGO QUIÑONEZ Y MICHAEL STWART Pocos bailan en concierto Recordando a los grandes de la salsa |
Un vueltita por aquí, un movimiento de cadera por allá. Cientos de personas se movieron hoy, sábado, en estricta clave y con mucho sabor salsero en el concierto Recordando a los grandes de la salsa, el cual se llevó a cabo en el coliseo Roberto Clemente en San Juan.
El evento estaba pautado para arrancar a las 7:30 de la noche, pero a esa hora fue que empezó a llegar el público, que no logró llenar en su totalidad el área de arena que fue preparada como una gran pista de baile.
A las 9:20 de la noche finalmente inició el espectáculo con tremendo rumbón entre salseros novatos y veteranos, entre ellos Michael Stuart, Moncho Rivera, Luisito Carrión y Domingo Quiñones, quienes fueron presentados por El Buho Loco, animador del evento. Este primer tema no se apreció muy bien porque hubo problemas con el sonido, pero eso no fue impedimento para que los presentes comenzaran a dar sus primeros pasos y, de paso, calentar motores para lo que les faltaba por bailar.
Y es que Recordando a los grandes de la salsa contó con un repertorio de sobre una veintena de éxitos salseros, que el público se gozó, a juzgar por sus sonrisas rumbosas y por los aplausos.
Aquí no vinimos a hablar vinimos a bailar. Hay muchas orquestas de la que hemos aprendido muchísimo como El Gran Combo de Puerto Rico, La Sonora Ponceña, Tommy Olivencia y su orquesta… Y hay una canción que hace tiempo quería cantar y se me dio”, expresó Michael Stuart para vocalizar el tema Cuando se canta bonito. Stuart expresó su emoción por ver este evento convertido en realidad, ya que él fue el responsable de organizarlo, y agradeció a sus compañeros músicos por acompañarlo.
El tercer tema de la noche recayó en Domingo Quiñones, quien cantó Vaso en colores. Luego vino Luisto Carrión para interpretar Tambó. Moncho Rivera, sobrino de Ismael Rivera, sorprendió con Casimira, mientras que Michael Stuart lo hizo con El carbonerito.
Los bailarines seguían agitando sus cuerpos y moviendo con velocidad y precisión sus pies, cuando sonó Indestructible en la voz de Domingo Quiñones, seguido por Pa bravo yo, tema que fue interpretado por Luisito Carrión, quien con su grito de “Histeriaaaa”, provocó más movimientos. Moncho Rivera, representando a su sangre, cantó Mi jaragual. La orquesta del concierto, dirigida por David Marcano, superó con éxito los problemas de sonido del inicio, demostrando una ejecución limpia que no decepcionó ni al escucha, ni al bailador.
Luego de nueve temas de pura salsa, Domingo Quiñones, Moncho Rivera, Luisito Carrión y Michael Stuart, decidieron poner la nota romántica de la noche, al interpretar un medley de boleros que le dieron un descanso a los bailadores. Entre los temas estaban Pronóstico, Alma con alma y Amada mía.
El reloj marcaba las 10:45 de la noche, cuando subió a tarima el cubano Juan José Hernández quien cantó Lluvia. Todavía faltaban diez temas y más cantantes por subir entre ellos, NG2, Rafael de Jesús, quien cantaría De patitas, así como Junior González, quien tendría a su cargo No hay amigos y Cari Caridad. Pero quizás los más esperados eran Tito Nieves, Paquito Pérez, Charlie Aponte y Andy Montañez, quien estaría a cargo del tema Un verano en Nueva York.
Roberto Rohena y Perico Ortiz también subirían a tarima para tocar el tema Bilongo con Moncho Rivera. El cierre del evento sería un junte entre todos los artistas invitados. Recordando a los grandes de la salsa, si bien no logró un respaldo masivo del público, valdría la pena repetirlo el año que viene porque es una buena plataforma para seguir impulsando a nuevos artistas y para seguir dando a conocer a los grandes maestros de la salsa.(Primera Hora)
Pero yo dije que eso era un grupode muertos tratando de revivir La Salsa, así no. Estos son salseros Clase C
ResponderEliminarla salsa no la reviven ni las oraciones.
ResponderEliminar