Levantarse trás la caída
Por: Diego A. Sosa Sosa
Hamburgo, Alemania
Si fuera por lo que se ha filosofado al respecto, nadie quedaría en el piso cuando tiene un tropiezo. Sin embargo, podemos ver cómo mucha gente tarda en levantarse después de una caída, mientras otros se ocupan de cavar un hueco en el que pasarán el resto de sus vidas y otros simplemente se sacuden el polvo y siguen su trayecto.
En mi escalada al Pico Duarte, en la República Dominicana, pude notar que hay diferentes caídas y diferentes aptitudes ante estas.
En mi escalada al Pico Duarte, en la República Dominicana, pude notar que hay diferentes caídas y diferentes aptitudes ante estas.
Al hacer un símil con la vida real, me pude dar cuenta de lo que nos pasa a los humanos en las diferentes situaciones.
Cuando iba subiendo tropecé en algunas ocasiones, pero el ímpetu no me dejaba quedarme lamentando el traspiés, miraba al frente y con mucho ánimo y decisión seguía mi camino a la cima, olvidando rápidamente la piedra que me había hecho tropezar. En esas horas de regocijo que me ofrecía la naturaleza, pude darme cuenta que las personas en el diario vivir actuamos de la misma forma, un traspiés cuando estamos subiendo en nuestra carrera profesional, casi no duele, nos hace fuertes y nos motiva a conseguir el objetivo. Puede ser un revés en un deporte o en una conquista, pero por lo regular lamemos nuestras heridas y seguimos adelante con más fuerza.
En un momento casi me caigo en una bajada que me presentó el ascenso. Y la vida es así, encontramos descensos cuando vamos subiendo, pero tampoco representan un gran obstáculo, la emoción de llegar a la meta era más poderosa que cualquier contratiempo que me pudiera llevar al piso.
Una vez alcanzada la cima, comenzó el descenso. En esta etapa conocerá el piso con muchos detalles. Es que caemos más cuando estamos bajando que cuando ascendemos, por muchas razones. El caso es que en esas caídas el ánimo no subía, sino que me desmotivaba, tenía que ser fuerte para volver a pararme y mantener la cabeza en alto. Mi mente se ocupaba más de la caída que había pasado, que del camino que tenía por recorrer... es que para mí la meta estaba ya alcanzada y esto era simplemente el camino de regreso. Pero la ironía de la vida es que la cima no es la meta, sino el camino lo es. El objetivo no podía ser llegar arriba, sino hacer todo el camino.
En la vida vamos recorriendo un camino y cada caída nos representa algo, pude aprender que subiendo las caídas son fáciles de tratar y se olvidan con rapidez, porque tenemos un objetivo en mente. Mientras que cuando estamos en un momento de descenso, nuestra mente no tiene un propósito bien definido y eso nos hace quedarnos más tiempo en el piso y nos motiva a acomodarnos en lo más profundo del hueco que cavamos o que nos han cavado.
En medio de la lluvia que nos atrapa descendiendo y después de varias caídas, me tracé una nueva meta, que era terminar el viaje en el punto cero. Sí, es que mi mente haabía terminado el viaje al coronar el Caribe, cuando alcancé los 3,087 metros de altitud. Sin embargo, el disfrute no había terminado, la bajada no era un castigo, sino parte del paseo. Las condiciones no eran ideales, pero la naturaleza me brindaba tanto, pero yo no podía ver el bosque por la cantidad de árboles que me lo ocultaban.
La vida no se termina cuando perdemos un empleo o cuando alguien nos quita algo; cuando un amor se separa o cuando alguien nos pone una piedra en el camino.
Cuando iba subiendo tropecé en algunas ocasiones, pero el ímpetu no me dejaba quedarme lamentando el traspiés, miraba al frente y con mucho ánimo y decisión seguía mi camino a la cima, olvidando rápidamente la piedra que me había hecho tropezar. En esas horas de regocijo que me ofrecía la naturaleza, pude darme cuenta que las personas en el diario vivir actuamos de la misma forma, un traspiés cuando estamos subiendo en nuestra carrera profesional, casi no duele, nos hace fuertes y nos motiva a conseguir el objetivo. Puede ser un revés en un deporte o en una conquista, pero por lo regular lamemos nuestras heridas y seguimos adelante con más fuerza.
En un momento casi me caigo en una bajada que me presentó el ascenso. Y la vida es así, encontramos descensos cuando vamos subiendo, pero tampoco representan un gran obstáculo, la emoción de llegar a la meta era más poderosa que cualquier contratiempo que me pudiera llevar al piso.
Una vez alcanzada la cima, comenzó el descenso. En esta etapa conocerá el piso con muchos detalles. Es que caemos más cuando estamos bajando que cuando ascendemos, por muchas razones. El caso es que en esas caídas el ánimo no subía, sino que me desmotivaba, tenía que ser fuerte para volver a pararme y mantener la cabeza en alto. Mi mente se ocupaba más de la caída que había pasado, que del camino que tenía por recorrer... es que para mí la meta estaba ya alcanzada y esto era simplemente el camino de regreso. Pero la ironía de la vida es que la cima no es la meta, sino el camino lo es. El objetivo no podía ser llegar arriba, sino hacer todo el camino.
En la vida vamos recorriendo un camino y cada caída nos representa algo, pude aprender que subiendo las caídas son fáciles de tratar y se olvidan con rapidez, porque tenemos un objetivo en mente. Mientras que cuando estamos en un momento de descenso, nuestra mente no tiene un propósito bien definido y eso nos hace quedarnos más tiempo en el piso y nos motiva a acomodarnos en lo más profundo del hueco que cavamos o que nos han cavado.
En medio de la lluvia que nos atrapa descendiendo y después de varias caídas, me tracé una nueva meta, que era terminar el viaje en el punto cero. Sí, es que mi mente haabía terminado el viaje al coronar el Caribe, cuando alcancé los 3,087 metros de altitud. Sin embargo, el disfrute no había terminado, la bajada no era un castigo, sino parte del paseo. Las condiciones no eran ideales, pero la naturaleza me brindaba tanto, pero yo no podía ver el bosque por la cantidad de árboles que me lo ocultaban.
La vida no se termina cuando perdemos un empleo o cuando alguien nos quita algo; cuando un amor se separa o cuando alguien nos pone una piedra en el camino.
Tendremos descensos que nos llevarán al valle, para poder iniciar la próxima escalada, o para enseñarnos que la vida en la planicie puede ser mejor que en las alturas. La vida no para cuando caemos, ni es mejor si nos quedamos lamentándonos, la vida sigue, y seremos parte de ella.
En mi libro Alcanza la Cumbre! cuento completa mi experiencia de ese ascenso maravilloso, que no terminó en lo más alto, sino que aún continúa.
Cada día tropezaremos, pero un propósito de vida nos hará levantar rápidamente y nos invitará a convertir en experiencia el traspié, no importa que estemos subiendo o creamos que estamos bajando... una meta que nos guíe nos enseñará que siempre ascendemos en esta bella vida que hemos decidido vivir con intensidad.
FRASE DE LA SEMANA
En mi libro Alcanza la Cumbre! cuento completa mi experiencia de ese ascenso maravilloso, que no terminó en lo más alto, sino que aún continúa.
Cada día tropezaremos, pero un propósito de vida nos hará levantar rápidamente y nos invitará a convertir en experiencia el traspié, no importa que estemos subiendo o creamos que estamos bajando... una meta que nos guíe nos enseñará que siempre ascendemos en esta bella vida que hemos decidido vivir con intensidad.
FRASE DE LA SEMANA
“No te preocupes ante una dificultad, mejor ocúpate de ella”.
Diego Sosa
Escritor, consultor, coach y conferencista dominicano Diego Sosa
QUÉ BIEN...
ResponderEliminarSIEMPRE ES BUENO ESCUCHAR PALABRAS MOTIVADORAS PARA LA SUPERACION PERSONAL...
"EN EL UMBRAL DEL TIEMPO" ES UNA SECCION BUENA PARA COLOCAR LAS COLABORACIONES DE ALGUNOS AMIGOS FORISTAS AMANTES DE LAS LETRAS...
SOBRE TODO, PORQUE ES "UN ESPACIO FICTICIO PARA FILOSOFAR...
EL MISMO ANONIMO, PERO AHORA LIGHT
Sr. Diego dios lo bendiga! por tan grato mensaje, hoy sabado y en para estos dias de vagancia sentarnos a meditar, me encanta leer escritos como estos, para levantar el animo, positivismo, que aplica una vivencia con la vida en si.
ResponderEliminarA veces nos encontramos perdido por no faltarnos algo material, un amor que se fué, un familiar que muere etc., hay cosas primordiales como es ganarse la vida, tener un empleo, pero la vida no termina cuando algo nos falta, todo esto que tenemos cada dia son parte de ella y debemos simplemente resolver y seguir adelante.
Excelente articulo!!!
L A (...todo el que tenga una anecdota de su vida desahoguese en el area de comentarios, que para eso es creada)
Excelente articulo, ese tipo de artículos son muy importantante en nuestra comunidad. Hace un tiempo que leí unas emotivas palabras de un gran Filosofo Dominicano, que serian un complemento a este magistral articulo:
ResponderEliminar"En la vida todo es Pasajero, menos el Chofer".
El Toro Macho.
ANONIMO MAYUSCULO, MISMO ANONIMO, CONOCIDO DESCONOCIDO, ME TIENES INTRIGADA POR SABER QUE FRUSTRACION TE AQUEJA AMIGO MIO...
ResponderEliminarSENCILLAMENTE no pué sé!!!
LA...la que detesta vergente aburrida
Ya veo que por fin estan aprendiendo a comprender la vida ya que como no la tienen y no la han vivido ,es bueno racalcar que estos mensajes tienen un delegado de virtudes que para entenderlas si no eres muy inteligente te tomas 1 semana leyendola para entenderlas y cuidado si mas de ahi ,digo para algunas personas que de alguna forma quieren criticar a alguien y al no encontrar ese hueco por donde meter la vala se valen de
ResponderEliminarcualquier bil comentario o como decimos alla buscarle las 20 patas al gato,no sere perfecto pero si tengo ese carisma de comentar los caminos de la vida la cual es refrescante y dicho de una manera unica como solo save decirlo ...elkaliman .... estava travajando ya que no soy vago y mi compania me nesecita...y al que le sirva el traje ..bueno ahi esta
ATT ELKALIMAN