Joseph Cáceres

Cantos de sirenas

No hay gente más afrentosa que un nuevo rico. Esos que vivieron en la extrema pobreza y que por un golpe de suerte se convierten en millonarios.

Es la gente más pesada, la más ostentosa, generalmente carente de una buena educación, y que por ende, se quieren llevar a todo el mundo por delante.

Visten ropa cara, de marca, pero no la saben combinar...

Andan en un carro Mercedes, Audi, Lexus, pero los pintan de letreros, les ponen spoilers y alerones,  bombillitos que prenden y apagan, abaratando su imagen.

Pero así como hay nuevos ricos, insufribles, que todo el mundo (a menos que sea un lambón) los quiere tener de lejos, también hay funcionarios del  gobierno.

Gente de las que andaban en chancleta, que hoy viajan en jeepeta, que resultan insoportables, por su prepotencia, arrogancia y altanería.

Usted los ve andando con escoltas y sirenas, como si en verdad fueran la gran cosa.

Han relajado tanto el asunto de las sirenas, que la gente le ha perdido el respeto, y ya no la sienten como una señal de emergencia.

En días pasados un señor como de 70 años, que se le veía muy caballeroso y respetuoso, estuvo a punto de chocar con un poste del tendido eléctrico en la Abrahan Lincoln, porque un carro que venía detrás le puso la más bullosa de los tres tonos que tenía en la sirena.

Ni que fuera Leonel que viene ahí, pensó...

El pobre casi se tira en la acera para darle paso al vehículo de marras.

Y qué resulta?. Que era nada más y nada menos que el chofer del funcionario el que iba solo en el carro a realizar una diligencia...

Nada menos que el chofer, aunque si hubiese sido el funcionario, tampoco tiene derecho a exigir que le abran paso de esa manera.

Pero eso es algo ya común que se ve en este relajo de país.

Otro caso fue el de un director de una institución del estado,que se antojó de hacer un "cocinao" en la casa con unos amigos, un viernes en la tarde.

Como le faltaban unos ingredientes, mandó a la doméstica a que fuera al supermercado a comprarlos, diciendole.

-Vete en el carro oficial, con el chofer, y pongan la sirena, para que traigan eso rápido.

Es decir, que la que andaba en la calle en un auto con placa oficial, y el ulular de una sirena a todo dar, no eran los bomberos para apagar un fuego...Tampoco la policía persiguiendo a los delincuentes ( cuando viene a ver se están persiguiendo ellos mismos). Sencillamente era la trabajadora doméstica, la que iba con ese cachet y ese "flow" en un carro tocando sirena para que le abrieran paso.

Tremenda dignataria del Abanico de Herrera!.