Cuando todo parecía retomar la calma en la vida de Kalimba, después de haber sido señalado de violar a una menor de edad en Chetumal, Quintana Roo, en diciembre del año pasado, e incluso haber pisado la cárcel por un breve tiempo, la historia del intérprete de 'Tocando fondo' da un giro inesperado.
La revista TVNotas habló en exclusiva con su ex prometida, Kimberly (de 26 años), y la modelo hizo tremendas declaraciones acerca de la relación que vivió con el cantante, y confiesa que no sólo ella fue abusada sexualmente, también su pequeña hija de 5 años.
Aquí un pequeño extracto de la entrevista que nos concedió Kimberly:
-¿Llevaste a tu pequeña con la ginecóloga?
"Al día siguiente de su confesión. La doctora la examinó completamente para ver si había estragos físicos y me dijo: 'esta niña sí fue tocada, presenta síntomas que no debe tener una pequeña de su edad'. Me explicó que había un desgarre leve n la parte de atrás. También me llamó la atención que cuando la doctora la revisaba mi hija mostraba rechazo".
-¿En el examen se hace referencia al tiempo en el cual la niña pudo ser abusara?
"La ginecóloga refirió que fue hace como ocho meses atrás (septiembre 2010)".
-¿Llegaste a notar actitudes raras en Kalimba, como que te pidiera dormirla, vestirla o bañarla?
"En cuanto a la ropa sí, él la cambiaba. En el asunto del baño no, porque siempre la he bañado yo. Con Christian sí se bañaban pero lo veía normal por ser hombres, además era mi pareja, jamás me hubiera esperado todo esto; estaba cegada y llena de confianza".
Además del abuso sexual a su hija, del que apenas se dio cuenta hace unos días cuando la niña dejó de dormir y comía compulsivamente, Kimberly asegura que Kalimba les pegaba a sus pequeños María José (de 5 años) y Christian (de 4).
"En el cristianismo, sobre todo en los fanáticos, se usa una vara de madera; de hecho toda la familia de él la usa con los niños; cualquier cosita y les dan un varazo. Con Christian, Kalimba era muy insistente en que lo disciplinara y era a veces tan estricto, que mi hijo salía morado de tanto llorar, y él me decía: 'déjalo, es por su bien'", confesó Kimberly.
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