sábado, 11 de junio de 2011


Disfruta tu café
Un grupo de profesionales, todos triunfadores en sus respectivas carreras, se juntó para visitar a su antiguo profesor.
Pronto la charla devino en quejas acerca del interminable "estrés" que les producía el trabajo y la vida en general.
El profesor les ofreció café, fue a la cocina y pronto regresó con una cafetera grande y una selección de tazas de lo más ecléctica: tazas de porcelana, plástico, vidrio, cristal, unas sencillas y baratas, otras decoradas, unas caras, otras realmente exquisitas.
Tranquilamente les dijo que escogieran una taza y se sirvieran un poco del café recién preparado.
Cuando todos se sirvieron, el viejo maestro se aclaró la garganta y con mucha calma y paciencia se dirigió al grupo: "Se habrán dado cuenta de que todas las tazas que lucían bonitas se terminaron primero y quedaron pocas de las más sencillas y baratas; lo que es natural, ya que cada quien prefiere lo mejor para sí mismo".
Ésa es realmente la causa de muchos de sus problemas relativos al "estrés". Continuó: "Les aseguro que la taza no le añadió calidad al café. En verdad la taza solamente disfraza o reviste lo que bebemos. Lo que ustedes querían era el café, no la taza, pero instintivamente buscaron las mejores. Después se pusieron a mirar las tazas de los demás". Ahora piensen en esto: La vida es el café.

1 comentario:

  1. Cóntrale Joseph, la tiraste fuerte.
    Eso es para darle cocote.

    La vanidad es lo que le complica las cosas al ser humano. A veces queremos y deseamos cosas que no necesitamos o sencillamente nunca la tendremos, pero aún asi vamos en pos de ella.

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NIURKA BAEZ,
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