LECTURAS DOMINICALES

Haciendo punto en otro clon

Ir detrás de figuras establecidas no es auspicioso...

En principio puede dar algún beneficio, pero a la larga las réplicas y clonaciones suelen resultar fallidas.

Lo podemos ilustrar con algunos ejemplos.

Cuando Alex Bueno subió a la cima de la popularidad, comenzaron a compararlo con Fernando Villalona, y lo bautizaron como "El Mayimbito".

Alex, en posibilidades de voz y afinación, según los entendidos, es mejor que Villalona, pero sus alabarderos se olvidaban de que lo de Mayimbe nada tiene que ver con eso.

Al final de cuentas, El Mayimbe siguió su ruta, pese a todas las dificultades que tuvo que sortear y los problemas conductuales que enfrentó, pero El Mayimbito Alex sucumbió. Terminó quedándose con lo peor de El Mayimbe: Los vicios, y después que cayó en eso más nunca pudo levantar cabeza.

Cuando Juan Carlos Pichardo despegó con un programa de variedades en Teleantillas, lo comenzaron a llamar "el otro gordo'', en alusión al fenecido Freddy Beras Goico.

Esa comparación dio al traste con  la imagen propia que se iba labrando en al televisión, y lo que sucedió no hay que volver a decirlo.

Richie Ricardo emergió con fuerza con un notable parecido a Johnny Ventura. Tratando de evadir la acusación de que lo  imitaba, decía que lo suyo era "natural", y hasta  lo asumió como eslogan.

Al final, mientras El Caballo siguió "trotando", el "Natural"se "desnaturalizó", y se quedó en el camino..."en el camino verde, camino verde, que da a la ermita..."

Sergio Hernández se "cobijó'' en José José y "cover" no le hizo bien al Marquez.

El Jeffrey se remontó en Juan Gabriel y aunque lo hacía parcialmente en sus "shows" las alas del cantante mexicano no le sirvieron para jugar a Icaro.

Después vino Marcel y se trasmutó en Selena, y parece que la difunta ejecutó una venganza en su contra. Bastante ya era con haberle servido de "medium"a Jennifer López.

Quieren más ejemplos de imitadores y clonadores que confirman aquello de que segundas partes fueron buenas?.

Oh!. Donde me dejan a Crispy, que surgió con sus trenzas detrás de Toño Rosario, y aunque al principio tuvo una buena pegada, terminó bien "crispy". No en vano cuando uno pide un combo de pollo frito en Kentucky Fried Chicken le preguntan "original o crispy?''. En este caso la gente siguió prefiriendo al "original'', que es Toño.

Pero como algunos no "cogen cabeza" entonces saltó al ruedo Kiko El Presidente, una verdadera réplica de Toño hasta cantando.

Lo único que pegó fue "vamos para la playa, a beber cerveza". Pero se quedó como dice el merengue "con la mano en la cabeza". Más ni nunca ha vuelto a ver a "linda".

Por cierto, que Toño es el artista que más dobles tiene, porque  en Puerto Rico y Estados Unidos hay gente que vive de hacer sus imitaciones.

Es una especie de Michael Jackson o Elvis Presley, que son los artistas con más dobles e imitadores.

Hay cantantes de piano bar  queriendo parapetarse en el medio amparándose en Shakira, y con guayón que se han dado han tenido que untarle mucho yodo y curarla con mucha "gasa y curitas''.

Para culminar, un caso presente y actual es el de la réplica de Héctor Acosta que se ha querido hacer en Los Toros Band, de manera consciente con el marcado propósito de instituirle un doble que haga su papel.

De los resultados, creo que no hay que hablar, porque los hechos hablan solos.

Hay que reconocer que nada en el arte es quimicamente puro. Que siempre hay influencias, pero éstas no deben ser marcadas, sino más bien controladas.

Esa es la clave. Juan Luis Guerra, por ejemplo tiene influencias de Ruben Blades, y  él mismo se confiesa seguidor de Los Beatles. De todo "algo se toma", pero no se lo deben ''tomar entero'', como hacen algunos  que se "emborrachan'' de tanto abrevar de la imagen y el estilo de otros 

He ahí la clave...Señores, con la clave, vamos a ponernos en ambiente: pla!, plá!, plá!, plá!, plá!