Joseph Cáceres

Trucomanía

Son muchos los trucos que tienen los artistas, en los que muchos cronistas de arte ni reparan.

Los mecanismos que emplean para sustentarse. Como por ejemplo el hecho cierto de que Beyonce para sus grabaciones canta en un tono, pero en sus shows  en vivo le bajan tres tonos.

Es decir, una cosa es la grabación y otra es cantar en vivo.

Rihanna se nutre mucho de la tecnología, de los estudios de grabación, y la voz que la gente escucha está ampliamente procesada.

No es muy auténtica que digamos, aunque los procesadores de voces es algo que muchos artistas emplean, hoy día, no se puede negar.

Más condiciones como intérprete tiene Alicia Keys. Es más natural que Rihanna. Bueno, por algo la consideran la reina del R&B.

Pero siguiendo con la trucomanía, aquí por ejemplo vino hace poco Enrique Iglesias, una mercancía más bien de laboratorio, que no se mueve sin un andamiaje de aparatos, y que "allanta" al público en sus conciertos besando y subiendo fanáticas al escenario.

El hijo de Julio Iglesias es un producto de la industria, al cual le ha ido muy bien no podemos negar.

Nuestro "pinche" más bien es con algunos amigos que no ejercen a plenitud el oficio de crítico, comentarista o periodista de arte.

Algo de lo que no se da cuenta el señor Borrego, para el cual todo es "me gustó", "estuvo fantástico", "abarrotó". De ahí no salen...No pueden. Y si pudieran no se la juegan, por temor a que luego, en represalia, no les manden boletas para asistir a los espectáculos.

Entonces usted a veces los ve de jurados en concursos de canto de esos que hacen en la televisión dizque "buscando las nuevas estrellas del canto y de la canción".

Los borregos no saben ni donde tienen el rabo...Pero ahí están "buscando estrellas".

Si decimos cuál "estrella" es la que encuentran, nos acusan luego de prosaicos...