Joseph Cáceres

Fernando Villalona, el mismito Mayimbe, así como lo ven, no acepta que los integrantes de su coro hagan muchos movimientos, que de alguna manera puedan llamar demasiado la atención. Villalona es muy celoso con su imagen, y aunque no lo crean, se comporta de manera radical y le llama la atención a cualquiera que se salga de sus postulados. Una cosa es lo que la gente ve desde fuera, y otra la que hay adentro.

Toño Rosario es celosímo cuando de llamar la atención se trata. Tampoco acepta que nadie lo opaque o brille más que él. Ego de artista, dicen...Se recuerda la ocasión en que su ex manager Peki Romero  adquirió una jeepeta Montero del año. Eran los tiempos en que tener una jeepeta era lo máximo en el ascenso social. Al Kukito no le gustó para nada el asunto, pues entendía que Peki le estaba echando un "guararé" a él que era la figura. El caso fue que para "desquitarse" en un viaje que tenía que tocar en Santiago se fue en su jeepeta, y ordenó que otra jeepeta que tenía fuera detrás escoltándolo, sin necesidad, solo por echarle una vaina a Romero. El metamensaje era de que si su manager tenía una jeepeta, el tenía dos.

Si de ostentación se trata, para que todo el mundo supiera que tenía un Mercedes, Wilfrido hizo que le incluyeran en las letras de "El Jardinero",  el estribillo que dice "tengo un Mercedes mejor que el de Wilfrido". Y claro, el mundo lo supo, porque fue uno de sus temas más pegados. Wilfrido también siempre ha sido muy celoso....No olviden que cuando Eddy Herrera y los demás cantantes de su frente estaban actuando, él se movía de un lado al otro del escenario, haciendo movimientos frenéticos con su trompeta en la mano, tratando de llamar la atención y buscando foco, para no quedar relegado.

Y siguiendo con los vehículos, cuando el Deferente Carlos T.Martínez tenía su programa "El Panorama Farandulero" en Onda Musical, compró con su esposa Vanegrey, dueña de un salón de belleza, un carro del año. Marío Báez Asunción, que era el director de Onda Musical, entendía que un locutor que tenía un programa arrendado en su emisora no podía tener un carro mejor que el suyo. Así que al poco tiempo cambió su vehículo por uno nuevo, del año, para no estar detrás del Deferente.

Y ya les contamos que Sergio Vargas decidió comprar un Mercedes y una Hummer, cuando en una ocasión que iba de gira al extranjero, se encontró con Peña Suazo, en el peaje, manejando un Mercedes, y el andaba en un vehículo modesto. Dijo que un Peña Suazo quien relativamente era nuevo en el medio no podía andar montado mejor que él....Sin embargo, los vehículos más convenientes para Sergio siempre han sido los todo terreno debido a que como se sabe tiene su casa en una loma de Villa Altagracia. Aunque luego de las pasadas elecciones al parecer está molesto con su gente y se ha mudado para Arroyo Hondo en la capital.

En pleno apogeo de Los Toros Band, antes de la salida de Héctor Acosta, el Toro Gerardo Díaz se montó en un Mercedes 500 del año color blanco, que le vendió César Motors. Pero tuvo que salir de él debido a que los locutores lo estaban "picando", y se negaban a hacerle favores cuando iba con los discos de promoción. "Tú andas en un Mercedes", le decían. Los locutores se sentían mal con su ostentación, porque no hay que olvidar que Gerardo Díaz había sido"disc-jokcey" en Radio Visión, antes de ser manager y promotor de orquestas. Sus viejos compañeros de la radio, en "olla", lo veían con ojeriza. Eso hizo que El Toro le devolviera el Mercedes a César Motors, y cogiera una jeepeta Prado, un vehículo más modesto.

Uno de los casos más pateticos de "echavainismo" con vehículos lo protagonizó el Jeffrey con un empresario que lo llevó de gira a Nueva York, quien relató el caso a un grupo de gente del medio en el lobby de Telemicro este martes.

Dice ese empresario que El Jeffrey pidió cuatro vehículos adicionales  para su "avanzada", en el trayecto del hotel donde estaba alojado, hasta el club donde iba a tocar una noche. Dizque cuatro vehículos para "su avanzada"...Ni que fuera el presidente Fernández. Aunque claro está, en ese tiempo el merenguero se hacía acopañar en Nueva York hasta por 15 personas que decían ser sus "guardaespaldas" y "personal de seguridad". Recordamos que una vez llegó a un espectáculo en el United Palace, con todo un contigente  de su llamada "avanzada" que entraron al lugar empujando gente. Eso si, que lo querían "picar".