Por Orlando Holguín
2.- Un laboratorio debería crear un producto para controlar a
las mujeres calientes, ninfómanas e insaciables. El producto podría llamarse “Antiputín 500”. No es que les va a quitar el deseo sexual, pero que se lo controle un poco. Ah, y que se pueda ingerir aun la dama vaya a tomar bebidas alcohólicas, porque ahí sí es verdad que la cosa se pone fea. Para algunas féminas en los 40, edad donde se dice que la mujer está en su punto sexual más interesante, esto sería un palo, más para las que salen a pescar a bares, discotecas y otros lugares, y que después de unos tragos, ¡ay papá! ¡Fuego, fuego!, como dice el merengue de las Chicán.
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