Un ejemplo a emular

La televisión que educa

La  historia de la televisión en Puerto Rico cambió el 6 de enero de 1958. Ese día inauguró WIPR, que más tarde se conocería como la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública. Esta estación fue el primer canal educativo del país  y de Latinoamérica.

A más de 50 años, la televisión educativa en Puerto Rico ha seguido creciendo. Actualmente hay otro canal que funciona con una licencia no comercial, además de WIPR, que es el canal del sistema universitario Ana G. Méndez, conocido como Sistema TV. Este canal inició operaciones hace 25 años y su fin es estrictamente ofrecer programación educativa.

Pero, ¿cuál es el propósito de los canales educativos y por qué son necesarios para el país? ¿Cómo han variado estos canales ante el  aumento en la programación de los canales comerciales (locales e internacionales) que se transmiten por los sistemas de cable y satélite?

Luis Agrait, quien se desempeñó como presidente de la Junta de Directores de WIPR de 2001 al 2007, y quien tiene  vasta experiencia en el tema, explicó que el rol principal de esta televisión es claramente educar, seguido por informar y divertir.

“Ésa es la fórmula desde que se crearon los medios educativos con la radio de la BBC (en Londres). La función de un canal o medio educativo es llevar unos contenidos  en su programación que lo diferencien de los canales  comerciales, tanto por su calidad, como por su contenido”, explicó.

Para Agrait es de  vital importancia  que existan los canales educativos en Puerto Rico  porque son éstos los que ofrecen una “alternativa” al televidente ante la programación que ofrece la televisión comercial, cuyo fin es la venta de un producto.

“El director de la Comisión Federal de Comunicaciones  (Newton Minow) en 1961 se refería  a la televisión comercial de Estados Unidos como un vasto desierto y ese desierto ocurre en cierta medida con la estandarización de ciertos contenidos de la televisión comercial. La función de la televisión educativa es ser la alternativa y, en su mejor momento, incluso, puede preceder los contenidos futuros de la televisión comercial. Por ejemplo, en Puerto Rico el primer noticiario de televisión fue Panorama mundial que se transmitió  por el canal 6  con Julio Rivera como director de noticias. Luego que salió, los canales comerciales copiaron ese formato para crear sus noticiarios”, destacó Agrait, quien señaló como otra innovación de la estación pública la creación  de  programas infantiles con contenido local.

Susan Marte, vicepresidenta asociada de Sistema TV y quien fuera vicepresidenta de programación de WIPR, resaltó que la televisión educativa en el país tuvo desde sus inicios la misión de servir como una especie de salón de clases para los niños y niñas, especialmente, para  aquellos de bajos recursos económicos.

“Después de la globalización eso cambió un poco porque la misión del canal educativo fue entonces darle una alternativa al televidente que no quiere ver lo comercial, de ofrecerle una programación de calidad, entretenida, pero con un contenido educativo”, puntualizó.

“Es importante que se mantengan porque estos canales se convierten en la voz del ciudadano y son los que realzan la cultura del país. Independientemente de todas las alternativas que tenemos, deben de permanecer”, expresó.

Al cuestionar sobre  la percepción de que la televisión educativa es aburrida, Marte comentó que eso es algo con lo que todos los canales educativos tiene que trabajar y que tiene su origen en los programas de antaño en los que un experto se sentaba a hablar sobre un tema, como si se tratara de un salón de clases.

“Con la llegada de la tecnología eso cambió y hoy en día se hace televisión educativa entretenida. Y es que educativo no es sinónimo de aburrido, pues cada vez se hacen programas más ágiles y dinámicos para el público, pero con buen contenido. De esa forma tiene que hacerse porque si no la televisión educativa desparecería”, opinó.

Agrait, por su parte, manifestó que cualquier televisión puede ser aburrida o entretenida, pues todo estriba en su calidad de producción.

Licencias y transmisión

En Puerto Rico, la radio y la televisión se rigen por la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés), agencia que se encarga de otorgar las licencias educativas y comerciales a las emisoras del país. Este organismo se encarga, entre otras cosas, de  que cada canal emita programación cuyo contenido  no sea obsceno, indecente o profano para el televidente.

En 1996 se creó la Junta Reglamentadora de Telecomunicaciones de Puerto Rico que se regula el mercado de las comunicaciones en el país. Es precisamente esta Junta la que está encargada de vigilar que los sistemas de cable del país “carguen” con los canales educativos de Puerto Rico, pues se considera como un servicio público para los ciudadanos. En la actualidad, la mayoría de estos sistemas cargan con  estos canales, mas no así los sistemas de satélite, algo que actualmente está tratando de regular dicha agencia.

“Nosotros vigilamos de que estas compañías  carguen con estos canales porque tiene que suplir una necesidad que hay en el pueblo y porque son estos canales los que fomentan la parte educativa”, precisó Sandra Torres, presidenta de la Junta Reglamentadora de Telecomunicaciones de Puerto Rico.

Retos y visiones

Ante el aumento y la diversidad de programas, tanto por los sistemas de cable como los de satélite, los canales educativos locales enfrentan diversos retos.

Margarita Millán, presidenta de Sistema TV, enfatizó que su fortaleza como canal es que cuentan con una programación educativa y atractiva para el televidente.

“El propósito de nosotros es educar, informar e inspirar con un contenido importante que ayude a la gente a entender mejor dónde vivimos y al final a mejorar la calidad e vida de los ciudadanos. Nuestra misión es proveer contenido que sea confiable porque para nosotros la televisión pública se basa en tratar a la audiencia como ciudadanos y no como consumidores”. comunicó Millán, a la vez que resaltó que uno de sus atractivos actuales como canal es que son el único en el país asociado con PBS.

Pedro Rúa Jovet, presidente de la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública, por su parte, destacó que el enfoque actual de la estación es ofrecer programación educativa, cultural y entretenida que sean del agrado del público.

“Este año reforzaremos el aspecto del desarrollo social y noticioso con programas de análisis... Las estaciones públicas tienen la tarea principal de identificar la necesidad del pueblo y crear talleres o adquirir programación para llenar esas necesidades que no llenan las estaciones comerciales”, acotó Rúa Jovet.

Contexto histórico de la TV educativa en Puerto Rico

El primer canal educativo en Puerto Rico  fue WIPR Televisión  en el año 1958.

La primera transmisión de la emisora incluyó la inauguración del canal a cargo del gobernador Luis Muñoz Marín, así como un programa de música campesina con la participación de Tomás “Maso” Rivera.

La estación pública fue enfocada desde sus inicios en producir contenido educativo. De hecho,  WIPR formó parte del Departamento de Instrucción Pública hasta  la década de 1970 que pasa a formar parte de la Compañía Telefónica de Puerto Rico. En la década de 1990 y con el propósito de tener mayores posibilidades de financiamiento se crea la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública.

A finales de la década de 1970, a través de la creación del Centro de Estudios Televisados (CET), Sistema Universitario Ana G. Méndez proveyó por primera vez en el país cursos básicos universitarios televisados que se transmitían a través de estaciones comerciales locales. Este esfuerzo dio pie a la creación en 1985 de  WMTJ Canal 40, primera y única estación privada de televisión educativa en la Isla. Con el paso del tiempo este canal se fue desarrollando hasta convertirse en lo que hoy es Sistema TV.(Primera Hora)