miércoles, 8 de febrero de 2012

PUBLICADA EN EL PERIODICO EL NACIONAL


Arte nacional
El humor en los tiempos del cólera
Escrito por: Joseph Caceres (josephcaceres.net)                   

Es curioso observar como las posibilidades de algunos comediantes criollos y programas de humor de realización local se agotan, al punto de desaparecer, sin haber ni siquiera intentado la posibilidad de trascender y de ser aceptado en el ámbito internacional.
Se han consumido en su propia tinta, sin que se haga alguna observación,que de alguna manera puedan servir para motivar un análisis reflexivo sobre la realidad que se vive en el difícil arte de hacer reir.

Una de las limitaciones más notorias que se advierte en el humor "Made in Dominican Republic es el de la internacionalización.

El humor dominicano se fundamenta en caracteres accidentales, muy locales, que se corresponden con nuestra cotidianidad, pero que dejan de lado valores universales.
Y al carecer de universabilidad se aleja de la posibilidad de ser comprendido y asimilado por fruidores alejados de nuestra realidad, por cultura y costumbres.

Nuestros humoristas crean un retrato de nuestros caracteres y
particularidades en los que no se ven retratados nuestros vecinos, aunque compartamos el mismo idioma.

Talvez porque no reconocen elementos fundamentales de nuestros códigos, que repito deberían tener universalidad, y que por el contrario se quedan permeando una mímesis de nuestra realidad social, que aunque sea muy parecida a otras, se rige por cánones muy particulares con caracteres muy diferenciados.

Si difícil se le hace a un humorista criollo hacernos reir, mucho mayores dificultades encuentra al otro lado del charco.
Se crean situaciones y personajes que nuestra gente percibe como muy verídicos por su conexión con la realidad que vivimos, pero no puede ocultarse su falta de congenialidad con valores expresados en los esquemas de otras sociedades, y ello los lleva a quedarse en un plano localista.

Se pudiera arguir que el asunto se reduce a critrerios de apreciación que entran a un nivel de difuminación semántica, sin embargo los hechos demuestran que aquí se practica un humor carenciado de creatividad, que repite una secuencia iterativa, donde se prefiere rendir culto a la banalidad, apelando al facilismo, y a esquemas que se vienen repitiendo desde  hace mucho tiempo que, como se puede ver, agotaron su ciclo vital.

1 comentario:

  1. Imitadores repentistas de nuestra realidad que nos provocan a ratos una sonrisa (casi mueca) o una carcajada forzada producida por la sorpresa de vernos reflejados como en espejo distorsionado de feria de atracciones. Puro efectismo. Un producto para consumo interno (salvo honrosas excepciones).
    Justo es decir que hemos fallado al exportar nuestra cultura e idiosincracia y hacerlas universales o al menos conocida con mayor amplitud. Ojalá nuestra incipiente industria del cine logre eso.
    Debemos reaccionar con energía ante la realidad de que estos casi tres cuarto de isla (no media isla) sea por lo general ubicado por nuestros vecinos.
    Cuando se dice que nuestros artistas y peloteros son nuestros embajadores no debe tratarse como mero enunciado o titulo ditirambico, debe esto ser articulado como un plan maestro de difusión (publicidad y mercadeo); debe Turismo (o a quien competa) dotarlos de herramientas (discurso, información) y dar apoyo material (pines, banderas, botones); todo esto coordinado para que responda a una estrategia bien dirigida y enfocada.
    Debemos darnos a conocer con amplitud.

    Un ejemplo de lo que el cine puede hacer por la transmisión de nuestra idiosincracia:
    Hay una página muy conocida de descarga de películas llamada "Fanatico", pues miren lo que aconteció en estos días.

    http://www.sdd-fanatico.org/lotoman-2011/

    Algo les gustó que pusieron por primera vez una película dominicana en este portal de descargas.

    Alpha

    ResponderEliminar

Se valora el envío de comentarios no ofensivos apegados a la moderación.
NIURKA BAEZ,
Moderadora de comentarios