Joseph Cáceres

Pide cárcel para Omega, para que se tranquilice

Moca, 14 marzo 2012

Estimado Sr. J. Caceres

Es un grato placer comunicarme un tan distinguido cronista de arte. 

Admiro su trabajo, pues le permite conocer interioridades de premios, viajar a diferentes partes del mundo donde hay un buen espectáculo. Esto le permite conocer donde hubo realmente un excelente show e informar sus apreciaciones desde su punto de vista crítico constructivo. Con el fin de que se haga lo menor de lo mejor.  Me agrada su página pues noto que lo hace con mucha mesura y ecuanimidad. Con parcialidad cuando se merece el elogio y con critica constructiva cuan desea que mejore algún aspecto donde hubo debilidad.

Tomando lo antes expuesto permítame sugerirle que de alguna forma el Sr. Peter de La Rosa, quién se hace llamar Omega cambie este tipo de accionar que le llevará al rechazo de un muy buena parte de la población, este tipo de escándalo que esta acostumbrado a realizar no le conviene como persona. Pues algún día alguien no reaccionará como hasta ahora lo han hecho. Si su interés es ganar fama con esto que recuerde que su mote significa «El último».  Si hace referencia su mal comportamiento a este significado, está actuando en consonancia al significado.

Creo que este señor De la Rosa le falta tener un encuentro personal con Dios y esto provocará cambio en él muy favorable.

Espero que este Sr. De la Rosa cambie de forma de actuar o  va a perder una parte importante de sus seguidores, entre ellos yo no me encuentro, pero me produce irritabilidad ver actuar a una persona con este comportamiento y mayor irritabilidad produce la forma como actúan las autoridades con este individuo.  Creo que deben dar un ejemplo con él y trancarlo por 2 ó 3 años para que tome conciencia y recapacite sobre su forma de actuar en la sociedad. 


También entiendo que una persona que no ha tenido educación y es la forma típica como reacciona a situaciones que no desea, los padres de esta persona también son culpables de su accionar. Por no enseñarle desde pequeño cómo debe comportarse una persona en la sociedad.  Sólo espero escuchar o poder leer que este individuo pida perdón a la sociedad dominicana por su comportamiento.

Usted con su experiencia puede ayudarle a cambiar ya sea por medios escritos o conversando con él. 

Agradezco su atención y reciba las bendiciones del Hacedor quien desea que todos vivamos en armonía.

Jose M. Guzmán C.