jueves, 5 de abril de 2012


Las apariencias engañan...
RADHY
Cuando Radhy Miranda se encontró con aquel mujerón vistiendo un apretado jean, se puso de inmediato en plan de conquista.
Una chica que se veía bien, y por ello pensó que para "levantársela" era necesario invertir un dinerito, de manera que ella no lo viera como un "arrastrado", pues hoy en día las mujeres desechan a los hombres "tímidos" a nivel de cartera, como dice Mario Emilio Pérez.
Lo que se le ocurrió fue invitarla a cenar a un restaurant de 5 estrellas. Caro, muy caro, de los que hay en la zona del Piantini.
Ya en el restaurante, con una mesa para dos, en plan de deslumbrarla pidió la carta de vino, de donde escogió un Protos Reserva. Suponía que una chica como ella era seguro aque tenía muchos pretendientes que la invitaban a cenar en lugares caros, y le brindaban bebidas  exquisitas, y no era verdad que él se iba a quedar detrás de nadie.
Así que cuando el camarero le descorchó la botella, que le dio a oler el tapón y le hizo catar el vino, Radhy, con aire de suficiencia, y muy orondo, aceptó la bebida como buena y válida.
El camarero llenó las copas, empezando por la de la dama, y Radhy estaba que no cabía en él por el gran nivel con que se estaba desarrollando la "operación  conquista". Cara, pero valía la pena, pensaba.
Brindaron por la felicidad, el amor, la amistad, la salud, la suerte y el amor, y despues del choque de copas, absorvieron  el contenido.
La dama de inmediato saboreó el sorbo, chispiando  la boca, como si tratara de capturar los taninos de aquel rico vino.
Para acelerar las palabras de la chica, se adelantó y le dijo con aire de satisfacción y orgullo.
- Es un Protos reservas....Qué te parece el vino?.
A lo que ella le respondió de inmediato,  sin miramiento.
-No está malo el vinito. Pero, por favor, pídeme una fría....

!Oh my gad!. ¡Radhy se quiso morir!...Al oir aquello lo subieron y lo bajaron, pues estaba gastando el salario del mes cenando con una tipa acostumbrada a centros cerveceros barrioteros con una cultura de colmadón, incapaz de apreciar lo que le estaban brindando.
¡Una fría, jumbo, era lo que quería la maldita!.
Pero como dice El Rompecama, cuando lo critican por beber whisky con jugo de manzana, "para el gusto se hicieron los colores".

3 comentarios:

  1. Termina el cuento zorro, se la dio o la desecho por ser barriotera.Le compro si o no la jumbo , explicale a este lobito feliz. jijiji

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  2. Yos mes vor a quedai casllado.......(?)

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  3. eso pasa donde guiera no solamente ayaaa,llege a una de agui de la urbe con unas profesoras,la disco en su mejor momento y ante tal algarabia ella pidieron a coro gueremos vino..... y se lo trajeron.le dijeron las variedades y como era de pasar sabian de vino lo gue yo se de medicina,escojieron una shit gue solo lo probaron y para no gue dal mal estaban obligada a disimular y cuando les dije gue tal cambiamos y le damos paso al caminante.... hay si y el resto es historia y ahi ella tiene su casa....

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NIURKA BAEZ,
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