Joseph Cáceres

En la farándula también se inventaban encuestas

Ahora que hay una "guerra de encuestas", algunas de empresas con tradición y prestigio, y otras que son un puro invento, porque usted las busca en Google y no aparecen (imaginense, busqué el nombre de una y me salió una fábrica de panties).

Precisamente ahora recuerdo que en la farándula también se han publicado encuestas inventadas.

Y lo voy a narrar porque ya esa época pasó, y no creo que los amigos protagonistas de esos hechos se puedan sentir mal, porque ya eso  es parte de la chercha anecdótica de la farándula.

Por el contrario, deberían sentirse bien de que ese recurso hoy día haya sido copiado por algunos políticos en campaña.

Me refiero específicamente a cuando Angel Puello se separó con Isha de Rafael Corporán, que montaron un programa paralelo en Radiotelevisión Dominicana.

Como parte del plan de ataque, Puello y el periodista Salvador Sánchez publicaban en los principales diarios páginas por intercambio completas de  unas encuestas donde Isha estaba siempre arriba.

La estrategia estaba dirigida a llamar la atención de las agencias publicitarias y los anunciantes.

Ello ponía furioso a Corporán, quien denunciaba que esas encuestas eran un invento de aposento de Angel Puello y Salvador Sánchez.

Y tenía razón Corporán, pero mientras tanto, ese "duo dinámico" provocaba confusión con sus "maldades".

Era lo mismo que cuando Willy Rodríguez, J. Pena Manso Jr. se dedicaban en una oficinita del edificio Santa Maria de la familia Brenes, a conspirar contra Johnny Ventura, a favor de Wilfrido Vargas, teniendo a Domingo Bautista como ejecutante en el terreno de muchas ideas maquiavélicas que salían de ese cuartito.

Terrible, terribe...Pero eran estrategias que si no provocaban daño frontal, dejaban efectos colaterales.

No como ahora en la farándula, que no hay estrategas, sino muchos muchachos de mandados y periodistas para los cuales "todo está bien", que no se atreven ni siquiera a decir cuando un espectáculo se cae, por temor a molestar a los empresarios.

Se sienten tan poca cosa, que si hablan mal, el empresario luego no los invita a otro show. Y así de ese modo no puede haber independencia de criterio, ni nadie puede creer en todo lo que se escribe y dice, con tanta gente hablando por "boca de ganso".

Bien jodido que está el medio con ese condicionamiento donde nadie se atreve a decir nada.

Claro, con excepción de esta página, que no le "coge corte ni coro" a nadie, al momento de decir las cosas como son.

No en vano la gente nos busca y nos lee tanto.

Eso no se compra en botica, ni en ruedas de prensa, cocteles ni viajes.