Los fumadores de puro integran una casta muy cara en la composición social de la farándula, pues tienen gustos y preferencias propias de magnates, ya que la afición a los cigarros les lleva a desgustar marcas que por su maduración, confección y "tiro" en la fumada alcanzan muy elevados precios en el mercado.
En una fumada cualquiera consume el salario de un pobre. Sobre todo porque los aficionados a los puros, que fuman por placer, como parte de su cotidianidad, comparten el común código de obsequiar cigarros para saborear y disfrutar en compañía los placeres de una buena bocanada.
Imaginense, Cameroom Cigar del malecón nos envío su oferta con motivo del Día de los Padres, ofreciendo un Opus X Perfection X, más un Decade Robusto, un Alec Bradley Prensado Toro, más un cortador de cortesía por la suma de 3,580 pesos, un paquetito que, fuera de la oferta, tiene un precio de 4,814 pesos.
Si a eso se le suman los tragos de whisky de malta o de Blue Label a mil pesos c/u sin impuestos incluidos ni propinas, podemos hablar de que la buena vida de los "fumanchuses" sobrepasa facilmente, en la cuenta, los placeres gastronómicos de cualquier comensal en un restaurante.
Para muchos, los fumadores son un fastidio, y les huyen como el "diablo a la cruz", por el "vaho" del cigarro.
El irreverente Sergio tiene una expresión muy coloquial de a qué huele la boca de los fumadores de cigarros, y no tiene ambages al decirlo hasta en sus "shows", pero que no vamos a repetir aquí porque en verdad suena muy feo.
Sin embargo, la mayoría de los fumadores de puros defienden a capa y espada su territorio y su afición, manteniendose al día con los "rankings" mundiales de revistas especializadas.
Para ellos, los que se expresan mal de su afición no son más que parte de la gleba ignorante, que no saben de placeres.
Hoy día el fumar se ha constituido en un signo de prestigio al más alto nivel. A tal punto que cuando delegaciones del gobierno salen a cónclaves internacionales, los regalos que más aprecian dignatarios y ministros extranjeros, son las cajas de puros que llevan los delegados dominicanos.
Quizás no está de más decir que el de fumar es probablemente el vicio más antiguo que tiene nuestra civilización, porque se remonta a la época del descubrimiento y la colonización, porque cuando llegaron los españoles se encontraron a los indígenas criollos fumando sus pachuchés.
Y qué decir de la tradición de los campesinos y de nuestros abuelos fumando rústicos tabacos muy artesanales, de andullos, en pipas y cachimbos?
En la secuencia fotográfica de Sergio, Marino Guzmán, Radhy Miranda y Bebeto, faltan un par de mujeres que también fuman, algunas en serio, otras por chercha.
En una fumada cualquiera consume el salario de un pobre. Sobre todo porque los aficionados a los puros, que fuman por placer, como parte de su cotidianidad, comparten el común código de obsequiar cigarros para saborear y disfrutar en compañía los placeres de una buena bocanada.
Imaginense, Cameroom Cigar del malecón nos envío su oferta con motivo del Día de los Padres, ofreciendo un Opus X Perfection X, más un Decade Robusto, un Alec Bradley Prensado Toro, más un cortador de cortesía por la suma de 3,580 pesos, un paquetito que, fuera de la oferta, tiene un precio de 4,814 pesos.
Si a eso se le suman los tragos de whisky de malta o de Blue Label a mil pesos c/u sin impuestos incluidos ni propinas, podemos hablar de que la buena vida de los "fumanchuses" sobrepasa facilmente, en la cuenta, los placeres gastronómicos de cualquier comensal en un restaurante.
Para muchos, los fumadores son un fastidio, y les huyen como el "diablo a la cruz", por el "vaho" del cigarro.
El irreverente Sergio tiene una expresión muy coloquial de a qué huele la boca de los fumadores de cigarros, y no tiene ambages al decirlo hasta en sus "shows", pero que no vamos a repetir aquí porque en verdad suena muy feo.
Sin embargo, la mayoría de los fumadores de puros defienden a capa y espada su territorio y su afición, manteniendose al día con los "rankings" mundiales de revistas especializadas.
Para ellos, los que se expresan mal de su afición no son más que parte de la gleba ignorante, que no saben de placeres.
Hoy día el fumar se ha constituido en un signo de prestigio al más alto nivel. A tal punto que cuando delegaciones del gobierno salen a cónclaves internacionales, los regalos que más aprecian dignatarios y ministros extranjeros, son las cajas de puros que llevan los delegados dominicanos.
Quizás no está de más decir que el de fumar es probablemente el vicio más antiguo que tiene nuestra civilización, porque se remonta a la época del descubrimiento y la colonización, porque cuando llegaron los españoles se encontraron a los indígenas criollos fumando sus pachuchés.
Y qué decir de la tradición de los campesinos y de nuestros abuelos fumando rústicos tabacos muy artesanales, de andullos, en pipas y cachimbos?
En la secuencia fotográfica de Sergio, Marino Guzmán, Radhy Miranda y Bebeto, faltan un par de mujeres que también fuman, algunas en serio, otras por chercha.
Pa'mi to'son unos comemierda.
ResponderEliminarAhora un nuevo vicio es ESCUCHAR CONVERSACIONES TELEFONICAS PRIVADAS.
ResponderEliminarESE ES EL PEOR DE LOS VICIOS.
Envicia tanto que hasta tu sombra tiene el teléfono pinchado para saber que piensa de ti.
-"ah el es un hombre honorable, no fuma, no bebe, no juega"
-"oohh y que hace en su tiempo libre"
-"Le hace un servicio al gobierno escuchando conversaciones telefónicas"
-"ahh coñ.. y de qué mald%# honor me hablas"