Carros
presidenciales...
Mientras Danilo Medina llegó a su juramentación a la sede
del Congreso en un BMW, Leonel Fernández lo hizo en un Lincoln Towncar, que
siempre ha sido su vehículo favorito, a pesar en que en sus actividades
oficiales, viajaba siempre en una jeepeta, y montado delante, no detrás.
Lo de Danilo en el BM llamó la atención, pues aunque se
trata de un vehículo de lujo, no "tiene pinta presidencial". Hugo
Beras, que es especialista en vehículos, lo puede decir con mayor certeza.
Danilo en su BMW |
Pero, lo de Danilo no es casual. Lo más seguro es que con
ello quiere mandar un mensaje de austeridad, que es precisamente parte de su
filosofía y temperamento habitual.
En eso puede que hasta se parezca un poco al profesor Juan
Bosch, que cuando se juramentó como presidente de la República, brindó ron con
agua de coco, en vez de champagne.
Rompió con ello con todo el glamour y el caché, y eso fue lo
que bebieron los invitados internacionales que llegaron a la toma de posesión. Eso si, que estaban los lambones o mejor dicho lambiscones,
haciendo "bembitas".
Juasn Bosch durante los siete meses de su presidencia desechó la pomposidad de los carros "pezcuezo largo", como como le llamaba en sus alocuciones.
Lincoln de Leonel |
Por cierto, cuentan que cuando Leonel salió de la
juramentación de Danilo, que se fue apenas con su ayudante, lo hizo tranquilito, sin el
aparataje de cuando era presidente, teniendo que pararse en los semáforos como
un ciudadano cualquiera.
Temo que le será difícil acostumbrarse. Ustedes saben lo que
es durar tantos años trasladándose
en una caravana presidida por
franqueadores, con una hilera de policias especiales en cada
esquina, dirigiendo el tránsito, para que el ejecutivo no se detuviera en
ningún sitio, y ahora estar
bregando en las esquinas con choferes de carros públicos, (de los de Hubieres
que son los más plebes), entre guaguas "voladoras", autobuses
amarillos de los que dicen "School Bus" sin llevar ningún estudiante,
carretas de haitianos tiradas por caballos cargadas de plátanos o limones,
motoconchistas, "deliverys".? No ombe no. Soy yo, y me voy un tiempo fuera, para
que nadie me vea, hasta que no baje la marea de la pérdida del "glamour" presidencial y las distinciones.
Siguiendo con los vehículos, a Hipólito le gustaban las
jeepetas Ford. Una vez en una inauguración en Villa Mella invitó al Torito a
que se fuera con él, dizque para "que llegara rápido", ya que la caravana
presidencial no se detiete en ninguna parte. Para ir ligero, pero también por
un tema de seguridad. (Para matar a Anastacio Somoza, su vehículo fue
interceptado con un obstáculo que detuvo su tránsito, lo que fue aprovechado para dispararle y
hacerle blanco con una bazooka).
El caso es que el Torito se subió con Hipólito, y dice que llegó en un santiamén.
Fue la vez aquella en que Hipólito mandó a que le compraran una funda de chicharrón con "fritos verdes" (tostones), y se
le fue "abrochando" en todo el trayecto de retorno al palacio.
Dice El Torito que se tuvo que comer un pedazo, y que a
Hipólito solo se le oía el "craki craki, craki" masticando los cueritos.
Los carros presidenciales en la época de Rafael Trujillo
eran los Cadillac y también los Oldsmobile. Pero solo los usaba para los actos oficiales.
Trujillo se tiraba a los barrios en carros pequeños, con los
vidrios entintados, sentado detrás para que nadie se percatara de que era él.
Andaba sin escolta. Lo hacía para supervisar personalmente las obras que ordenaba construir.
No es de extrañar que lo ajusticiaran viajando como un
ciudadano cualquiera, en un sencillo Chévrolet Bel Air.
El auto de Balaguer, que hoy se exhibe en un museo |
Uno de los presidentes más "ñono" con su carro fue
el doctor Joaquín Balaguer, quien por 30 años mantuvo su carro LTD y nadie se
lo hizo cambiar.
Se recuerda que en una de sus juramentaciones como
presidente de la República, Jacinto Peynado que era importador de vehículos, y el concesionario de la
Delta Comercial, le regaló un vehículo nuevo, para que dejara su viejo LTD y se
montara en un carro más moderno.
Pero Balaguer le dijo que no. Que él deseaba seguir en su
"carrancho", (que no era carrancho nada) que él se sentía cómodo con
su carro.
Lo que hicieron fue reacondicionarlo, reforzarle el
blindaje, y ahí siguió el doctor
Balaguer por todas partes con su carro pasado de moda, qud algunos criticaban,
como queriendo que el doctor anduviera "briseando" en un Ferrari.
Pero el BMW es mas caro que el Lincoln town car...el Lincolm solo lo usan los taxistas en USA
ResponderEliminarY ese lincol de leonel son los quee usa las policia en la mayoria de los estado de usa.
ResponderEliminarAusteridad!
ResponderEliminarJaajjajajajajaaajaaja
Bueno ya yo vi.
jajajajaja,la verdad que ustedes son jodones con hipolito abrochandose sus chicharrones con fritos es mas bueno que el carajo.
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