Joseph Cáceres

La sabiduría popular posee un valor imponderable en la vida diaria. Muchos son los teóricos graduados  de escuelas y academias que aplican nuevas normas y estrategias, que en muchas ocasiones colapsan, fallan, frente a los conocimientos empíricos que en el terreno aportan campesinos y gente del pueblo, que sin ninguna herramienta son capaces de descifrar y anticipar la ocurrencia de fenómenos meteorológicos, para los cuales existen hoy día sofisticados satélites.
En otros tiempos, no había eso. Pero los campesinos sabían cuando venía una tormenta, sin servicio meteorológico satelital, The Weather Channel ni el famoso aviso-cliché a las pequeñas embarcaciones de que "deben permanecer en puerto".
Porque la gente del pueblo se rige por pura intuición, y avisos provistos por la naturaleza. Para los pescadores, la calma en el mar antecede a la tormenta. Cuídese del mar muy sereno...
Para los campesinos, observar aves marinas posadas en tierra. De allí surgió la célebre expresión de: Pájaro de mar en tierra?...¡Jum!.
Si las aves de mar buscan tierra es señal de que están huyendo de una tormenta inminente, y no hay mejor radar que ese para ponerse "donde el capitán lo vea" y tomar las precauciones de lugar para que el ciclón no se lleve hasta las vacas.
Pero sabías que eso mismo aplica en la vida diaria?. Zorro te va a poner el ejemplo...
Si tú vives de manera muy modesta en el Barrio Capotillo y trabajas en una empresa de la Zona Industrial de Herrera, donde nunca has hablado con los altos ejecutivos, y de repente un día te encuentras con que te está esperando en tu casa el gerente, tomando café, jugando con tu perro viralata y con tus hijos, muy sociable y haciendo chercha, cosa que tú no te ibas a imaginar jamás....Qué tu harías?.
Bueno, si eres de los que perteneces al "manual del perfecto pendejo", probablemente te vas a derretir dando las gracias, y te volverás loco agradeciendo la visita del jefe a tu humilde vivienda.
Pero si eres "culebro", perspicaz,  te dirás como el campesino, aunque sea para tus adentros: "Pájaro de mar en tierra?". ¡Jum!. Y Zorro diría,  huyamos hacia la izquierda, como el largarto Guancho. ¡Ese huevo quiere sal!.