Joseph Cáceres

Respondiendo la inquietud de la amiga Amaya Gutierrez en torno al cantante Anthony Santos, puedo decir que es el artista dominicano que, contrario a lo que muchos piensan, mejor ha sabido mercadear su imagen.
Se ha regido por una simple regla del mercado según la cual, los productos de consumo masivo que escasean, se encarecen.
Anthony Santos no se anda prodigando, quemándose con apariciones por todas partes. Y hasta para verlo, obliga a un viaje a Las Clavelillas en Montecristi. Ello sin embargo no asegura poder verlo.
Como parte de su "marketing" se cotiza a precios muy elevados y aún pagando lo que vale su contrato, no accede con facilidad a cualquiera que lo quiera. Es decir, dejando de ganar, gana más.
Hay artista que en su desesperación tienen que aceptar lo que les ofrezcan. Pero abaratan su imagen, y luego es difícil que quieran pagar más por él.
Fue lo que sucedió con un espectáculo de intérpretes urbanas que se presentó en Soho, de Santiago.
La gente no quería pagar el precio de taquilla que se estaba cobrando en la entrada, porque esas artistas ya las había visto en todos los cars wash de la ciudad, gratuitamente, y hasta con un sancocho incluido.
La fama de inaccesible le ha servido mucho para sustentar su figura a Anthony Santos, y es por ello que la gente abarrota los lugares donde se presenta con los "covers" y los precios de consumo mínimo más elevados.
Sin ser un erudito ni un mercadólogo, Anthony ha sabido crear una marca con su nombre e imagen. Lo demostró en el Soberano, que durante su actuación la medición del rating alcanzó el más alto porcentaje de toda la noche.
Claro, es un artista que ni siquiera se puede ver por televisión. 
Tiene su estilo muy particular como artista y con la música que hace, con lo que alcanza niveles altos de masificación popular, pero Anthony en gran medida es producto de su propio mercadeo.
Ha hecho lo mismo que Julio Iglesias que en base a estrategia se pudo consolidar como el cantante hispano de más fama en el mundo.
No es el único que administra su figura, porque ahí está Juan Luis Guerra. Pero este es un cantante de conciertos, no de discotecas como es el caso de Anthony Santos.
* Fotos:elmásvariado.com