Joseph Cáceres

El nuevo Superman no luce ricito en la frente. Sus músculos sobrepasan la tercera dimensión. Parece salido de la factoría Disney, aunque su incursión catódica tiene más bien visos históricos como protagonista de Los Tudor. Practica el inglés de la Commonwealth. No usa las cabinas para transformarse, sino que aparece transmutado sin previo aviso. Y para más INRI, no lleva calzoncillos rojos por encima del traje –“Me los probé y parecía que llevaba un condón gigante”, aseguraba en una entrevista. “¡Me sentí como un enorme homosexual británico!”, confesó. Lo único que respeta son los puños fuera para tomar vuelo. Henry Cavill encarna la penúltima revisión del primer superhéroe en El hombre de acero.

Pero antes de que el joven actor británico se calzara las mallas, otros actores retaron los límites del formato analógico y volaron sobre desiertos para llegar al rescate de Metrópolis. Y no siempre con mucha suerte –por mediación o no de Lex Luthor-.
Superman and the Mole-Men (1951)

La primera incursión cinematográfica del superhéroe fue responsabilidad del actor George Reeves. Lee Sholem dirigió la película, y el guion sobre cómo el héroe defendía a unos pequeños seres surgidos del centro de la Tierra lo firmó Richard Fielding. Tardaron 12 días en grabar y el metraje alcanzó los 58 minutos. Reeves, secundario de Lo que el viento se llevó, dio el salto a la televisión -y la fama- con una serie sobre Superman.
Superman, la saga de Reeve (1978, 1980, 1983 y 1987

En la lista de candidatos estaban Robert Redford y Paul Newman. Pero las exigencias económicas y las agendas saturadas terminaron por convertir a Christopher Reeve en flamante ganador. El científico Jor-El, padre de Superman, último convencido de la viabilidad de Krypton, estuvo interpretado por Marlon Brando. Previo pago de 27.000 dólares la hora, 3,7 millones en la factura final, por 10 minutos de pantalla y un repaso rápido al guion en el momento que pisó el set de rodaje. El presupuesto total de la película llegó a los 196 millones de dólares con una taquilla de 25, en 580 cines de Estados Unidos.
La segunda parte ajustó el presupuesto con la consiguiente salida de Brando del reparto. El general Zod, némesis principal del héroe en la revisión de 2013, también protagonizó la secuela. La cuarta y concienciada entrega estaba ideada por el propio Reeve. Decidió incluir un mensaje pacífico, contra el desarme nuclear y de protección medioambiental para cerrar el ciclo.
Con la capa en el armario, el actor deambuló de desapercibidas producciones cinematográficas a películas para televisión hasta que en 1995 un accidente hípico le postrara en una silla de ruedas. En octubre de 2004 falleció a los 52 años víctima de un ataque cardíaco.
Superman Retur

 Al actor Brandon Routh y al director Bryan Singer, responsable de X-Men les tocó lidiar con una Lois Lane enamorada, y no de Superman, y un Lex Luthor convertido en hombre de poder, y una ciudadanía que no recordaba al señor de la capa roja y el calzón amarillo. Por suerte a Synger no le fue tan mal –de hecho, abandonó la dirección de esta nueva entrega por lo que pudiera pasar-, mientras que a Routh no solo le dio calabazas su amada periodista, sino la industria del cine en general.

Repasada la cartilla, ¿cuál es tu Superman favorito?
(El País)