A veces hay gente que parte a la ligera sobre situaciones que se dan en eventos como el espectáculo de aniversario de Telemicro.
Se quedan en lo superficial, y no ahondan sobre los hechos, acostumbrados como están a que las ramas les impidan ver el bosque.
Se dedican, por ejemplo, a comparar el comportamiento del público que acudió a ver a Romeo en su concierto en el Estadio Olímpico, como también la presentación que hizo allí Juan Luis Guerra.
En todos hubo mucha gente. Pero, se han detenido a pensar en que con relación al que hizo Telemicro, habían elementos diferenciados entre los públicos, que le conferían a uno y a otros características y peculiaridades distintas?
Claro que si.
En los conciertos de Romeo, Juan Luis, la gente pagó para estar allí. Compró una taquilla, por lo genral con anticipación. Ese solo hecho produce en empoderamiento, un sentido del derecho adquirido que pesa mucho en el comportamiento de la gente.
Es muy socorrida la expresión de "yo pagué mis cuartos", que se dice ante cualquier situación que se presente ya dentro del recinto.
O sea, nadie me puede venir con impedimentos, reclamos ni mucha exigencia, por que yo pague mi dinero para ver el espectáculo, y no entre de gratis.
Se puede advertir como el solo hecho de que se pagó por algo confiere derechos que no les corresponden a quien ha entrado "de bola" o de gratis, que no puede por ello exigir mucho.
Se estigmatiza de esa manera a lo gratuito.
Imaginense entonces las mentalidad que prevalece en un espectáculo donde todos los que están han accesado de maner gratuita.
No en vano un refrán popular refiere que "al caballo dao' no se le mira dientes".
Como también están las expresiones de que "lo barato sale caro", y "a lo que nada nos cuesta, hagámosle fiesta".
Es lo que explica los desórdenes que a veces se producen en actividades que son gratuitas, donde acude gente que no le importa nada lo que ocurre en el recinto.
Eso nos recuerda la ocasión en que en Nueva York pusieron de moda unos bailes de 7 orquestas por un dólar.
Hasta los vagos que estaban en la calle, cogiendo frío y pidiendo, entraban a los bailes a "calentarse", y por qué no?, a plagosear algunos tragos gratis.
Los eventos gratuitos cumplen y llenan su rol, pero al momento de evaluarlos hay que diferenciarlos de los que se hacen con la gente pagando taquilla, porque no es lo mismo ni es igual.
No se puede pedir mucho, pues como ya se dijo es un espectáculo gratuito, cosa que se si se fuera pagar, no seria barato.
ResponderEliminarComo televidente, no como público presente, creo que la participación de la Boricua Ivy Quien, no la fue de la mejor por la su gravidez. Ella esta en embarazada y no se ve de la mejor forma. De por sí ella no es una mujer elegante y menos en estado.
Además que con el calor ambiente y la que produce las luces pudo haberse desmayado. Se pudo elegir a otro cantante. Creo que las personas que la seleccionaron para traerla desde Puerto Rico no tomaron en cuenta su condición humana. Lo mejor era que la hubiesen dejado para el próximo año donde ya estaría en mejor estado para estar en un espectáculo al aire libre.
una vez yo fui a una fiesta en el trocadero con 25 orquesta por 25 dolares y dentro la 25 estaba juan luis guerra y 440 eso fue en los 80.quien lo diria
ResponderEliminargran cosa, juan luis guerra era que le hacia los coros a la cantante vickiana en sus producciones musicales y tocaba la guitarra electrica en los lps de omar franco.
ResponderEliminardigital 15 y telemicro estan dirigida a un publico barrial, chopo y rastrero.
ResponderEliminarTelemicro y Digital 15 = CHOPO
ResponderEliminar