Joseph Cáceres

¿Por qué las Seychelles son las preferidas de nuestros famosos? 

Estas islas son un rincón paradisíaco del océano Índico donde desconectar el reloj, olvidarse de las preocupaciones y bucear. Iker Casillas y Sara Carbonero son los últimos que se han escapado para allá, y, otra pareja formada por futbolista y periodista, Xavi Hernández y su ya mujer, están a punto de hacerlo.

Las islas Seychelles no son solo un destino obligado para los amantes del submarinismo, sino también para los amantes a secas, que hallan aquí un escenario absolutamente romántico. Por eso, este paraíso lejano es uno de los destinos turísticos preferidos de los recién casados, como Catherine y Guillermo de Inglaterra, sir Paul McCartney, que alquiló una de las islas para pasar la luna de miel con su ex mujer Hether Mills, dentro de unos días, Xavi Hernández y su mujer Nùria Cunillera, o los futuros papás Iker Casillas y Sara Carbonero. El archipiélago es hasta tal punto el reino del amor que aquí crece el coco de mer, una especie autóctona a cuyas semillas se le atribuyen efectos afrodisíacos. 

La república de Seychelles, situada junto a Madagascar, está formada por un archipiélago de 155 islas, algunas de origen granítico y otras formadas por espectaculares arrecifes de coral. No cabe duda de que Seychelles es un trozo de paraíso salpicado por el Índico, con un paisaje marino y terrestre formidable. Casi la mitad de su territorio ha sido declarado parque nacional. En Praslin, quizá la isla de mayor fama por su belleza, y conocida como “la perla del Índico”, se extienden casi 40 kilómetros cuadrados de naturaleza intacta. Pero también las pequeñas poblaciones son encantadoras. Victoria, su diminuta capital situada en la isla de Mahé, está formada por un puñado de casas coloniales y un colorido mercado de abastos.

 

A los encantos de este remoto escenario de postal perfecta, de arena blanca y fina, casi polvo, aguas turquesas y serenas, especies autóctonas fantásticas, como la tortuga gigante, hay que añadir su espléndida gastronomía. Frutas tropicales, pescados frescos, aves y carnes son los manjares de una comida exótica y de fusión, mezcla de las culturas francesa, india y criolla, que han dejado huella en las islas y en sus fogones. Pulpo con leche de coco, murciélago alimentado con frutas al curry, vieira con mantequilla de ajo… son algunos de los platos más extravagantes que se acompañan con deliciosos zumos naturales de mango, papaya o maracuyá.

El enamorado, el hedonista, el amante de la naturaleza o el que reúna todas estas características a la vez tiene varias alternativas para conocer los secretos del océano y de su gigantesco habitante. El crucero por las islas es, quizá, la opción más solicitada, pero también es posible alojarse en un lujoso hotel o bungalow y practicar deportes acuáticos, descubrir la excepcional fauna y flora tropical, sus graníticas rocas esculpidas por el viento, bucear no solo en sus aguas, sino también en su pasado colonial y tomarse un daiquiri a la orilla del mar con las hileras de cocoteros como telón de fondo.

Dónde dormir 

En Banyan Tree (banyantree.com/en/seychelles/), y en el Hilton Seychelles Northolme Resort and Spa (hilton.com), ambos en la idílica isla de Mahé. Y también en el Four Seasons Resort Seychelles (fourseasons.com/seychelles/), un paraíso perdido entre la vegetación. Buenas opciones son también en Mahé, Le Meridien Fisherman’s Cove y Le Meriden Barbarons lemeridien.com. Otra buena alternativa es disfrutar de una estancia exclusiva en alguno de los 27 bungalows de la isla de Denis Island (denisisland.com).

Dónde comer 

En Beau Vallon, el restaurante Boat House (boathouse.sc) es un clásico con un excelente buffet criollo. En Victoria, el Marie-Antoinette (marieantoinette.sc) es un restaurante colonial exquisito. En la isla Round, el Chez Gaby tiene fama de servir la mejor comida criolla de Seychelles. En la isla de Saint Anne, Le Mont Fleuri (beachcomber-hotels.com) ofrece una cena de altura, en un espacio elevado sobre unos grandes postes con vistas a Mahé. 

En las islas Seychelles no te pierdas: 

Una expedición para ver el tiburón ballena, que organiza la empresa The Underwater Centre is Seychelles; el Museo de Historia Natural de Victoria, donde aprender, entre otras cosas, los secretos de la vida marina. O las playas Anse Soleil y Anse Petite Police, en Mahé, recónditas, solitarias y paradisíacas. O el Parque Nacional Marino de Ste. Anne, donde contemplar las tortugas gigantes. O la isla Cousin, a dos kilómetros de la costa de Praslin, declarada reserva natural.