jueves, 1 de agosto de 2013


Por Juan Colón
Para ver un camino claro, sin importar cuán largo y difícil de transitar sea, necesitamos tener una visión clara de las razones por las cuales queremos recorrerlo  y también nos permite definir los tipos de herramientas que necesitamos para lograr lo anhelado.
Cuatro herramientas fundamentales nos deben acompañar durante el trayecto y luego estas se quedan con nosotros formando parte de nuestra unidad con el instrumento.
Disciplina, perseverancia, determinación y conciencia, para estar cimentados en sólidos fundamentos que será la columna vertebral de nuestra vida en nuestra profesión y en nuestro diario vivir.
Ser disciplinado implica muchos factores, saber estudiar, qué estudiar y como estudiar, porque no podemos lograr el éxito y convertirnos en seres disciplinados si no sabemos el valor intrínseco de esta grandiosa palabra.
Que no existan excusas válidas para dejar para mañana algo que sientas no puedas dominar, la disciplina te abre las puertas de las otras tres palabras mencionadas con anterioridad.
La perseverancia te permite convertirte en tu propio instructor, solo recibes del maestro lo que tienes que hacer y por qué y luego te encargues tú mismo de cumplir ese propósito.
Para nadie es un secreto, cuán difícil es aprenderse las escalas fundamentales, las progresiones, las armonías de las canciones en tonalidades diferentes, pero no hay formas de cómo acortar los caminos, solo la perseverancia te permite lograr los objetivos.
Determinación para llegar al destino final, es básico estar claro, las razones por las que queremos llegar, como llegar, porque llegar y para que llegar. Si tenemos la fuerza que representa tener determinación lo podremos lograr.
Es como el caballo de carrera, se le cubre sus laterales en la cara para evitarle distracciones y que su concentración sea mayor para lograr su objetivo dentro del hipódromo.
Conciencia, es lo que te permite el desarrollo de las tres palabras anteriores, porque debes ser tu propio juez, aunque te duela en el alma, no debes querer fingir lo que no eres porque el único perjudicado al final serás tú, nadie más.
El desarrollo de la conciencia será la medida exacta de tu caminar, de tu progreso sin necesidad de buscar opiniones ajenas, o con la esperanza de que alguien te diga que lo haces bien, si bien es cierto que a veces necesitamos un estímulo, no podemos sentarnos a esperarlo o a buscar quien lo haga.
 La conciencia es la que te permite entender que el otro al lado tuyo toca mejor porque se ha fajado sin distracciones, solo con el objetivo principal de aprender a soplar un instrumento y lograr descollar como profesional.
Todos tenemos dentro las cualidades para ser profesionales, busquemos dentro de nuestro ser las disposiciones naturales (talentos) que sintamos tener.
 Hay personas que logran con éxito fenomenal hacer dos, tres y cuatro cosas de manera excelente, pero nunca vemos las horas de trabajo puesta sobre sus hombros.
 Disciplina, perseverancia, determinación y conciencia, cuatro baluartes para lograr el éxito contigo mismo y librar la más dura de todas las batallas, ser honesto contigo mismo.

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