Joseph Cáceres

   

 VAMOS DE ROBO

     Por: J. Eduardo Martínez.

Imagine usted que le declaramos la guerra a Estados Unidos de América.  Inmediatamente el Pentágono se reuniría de emergencia para ver qué tipo de enemigo podemos ser.  Lo primero que les preocuparía, sería la cantidad de generales que tenemos y el hecho de que muchos de ellos viven mejor que algunos generales de allá.  Eso los pondrá “chivos” de antemano.

Lógicamente, enviarán un par de portaaviones a nuestras costas para amedrentarnos, pero de inmediato les enviaremos un batallón de P-51 para enfrentarlos.  Cuando los americanos vean estos aviones, explotarán de la risa y rodarán por el suelo en un ataque imparable de carcajadas.  Mientras esto sucede, aprovechamos la oportunidad y hundimos las naves norteamericanas.

En una estrategia de alta inteligencia, infiltramos a varios agentes secretos en sus organismos de investigación, los cuales irán ataviados como debe ser: lentes oscuros, pistola al cinto, donde todo el mundo la vea, mirando mal a todo el que les pasa por el lado, un radio de comunicación en la mano, etc.  Sería muy difícil para los americanos descubrirlos, por lo que su labor tendría un éxito aplastante.

De seguro que nos envían por lo menos 2 submarinos atómicos, pero como estos aparatos rastrean a través del sonar, solo hay que ponerles un tema de Omega o del Lápiz Consciente y eso es suficiente para que exploten y se pulvericen.

Como estrategia de combate, les enviamos 52 carros bomba, para ubicarlos en cada estado de la Unión Americana.  Este material lo tenemos de sobra, ya que utilizaríamos carros del transporte público, dotados de tanques de gas.  Aquí la participación de Juan Hubieres puede ser de vital importancia, por la enorme cantidad de carros bomba que tiene su sindicato.

Un paso estratégico importante, sería “ordenarle” a los peloteros dominicanos que militan en el béisbol de Grandes Ligas, el que abandonen de inmediato dicha organización y regresen a nuestro país, cuestión de “desestabilizar” dicha competencia.  Como sabemos lo disciplinados que son los dominicanos, es seguro que los peloteros acatarán la orden.  A los jugadores de baloncesto de la NBA, les daremos las mismas instrucciones, aunque a Amelia Vega no le gustará que Horford abandone dicha liga.  No importa, es asunto de guerra.

A los artistas dominicanos se les prohibirá hacer giras artísticas a territorio norteamericano, aunque en el interín le hayan dado la visa a Fefita La Grande.  Esto desestabilizaría la economía yanqui, por lo largas, frecuentes  y beneficiosas que son algunas giras de artistas nuestros, según “notas de prensa” que llegan a los medios.

Los promotores de espectáculos y los colaboradores periodísticos de esta página, como forma de preservarlos,  serán llamados a regresar a la patria, lo que ellos harán con todo el gusto, por la calidad de vida de nuestro país.

Como sabemos que la OEA, la ONU y otras organizaciones internacionales estarán de nuestro lado, como siempre ha sido, les pediremos que emitan un documento en el cual se  pida la rendición de Norteamérica en 24 horas.  Evidentemente, luego de esto vendrá la esperada rendición sin condiciones y procederemos a tomar el territorio gringo.

Luego de ganada esta guerra, viene lo difícil… Y ahora qué haremos con tanta riqueza?

De repente me desperté y me di cuenta de que era un sueño… Uff, qué suerte.