Manual del Motorista Dominicano
Por Orlando Holguín
Dicen que la motocicleta, motor por estos predios, es la venganza de los japoneses contra América. Es una especulación un poco macabra, pues dicen que los nipones fabricaron el biciclo con motor para vengar una de los crímenes que deja peor parada a la salvaje humanidad: El lanzamiento de la bomba atómica en Hiroshima y Nagasaki.
La motocicleta (motor) no es mala, es un medio de transporte útil, sólo que tiene dos unidades de aquello que se considera el más grande invento de la humanidad: la rueda (¿qué creía usted que era el avión, la computadora o los antibióticos?) y por tanto hay que mantener el equilibrio mientras se corre. El dominicano es uno que piensa que el motor no es una pieza de transporte, sino un carro Fórmula 1, con el cual debe llevarse el mundo por delante. Hemos concebido el Manual del Motorista Dominicano, y se lo dedicamos a todos aquellos que andan por esas calles de Dios como estrellas fugaces terrenales y no siderales.
1.- Las intersecciones son una lotería. Es sencillo, a veces vienen carros y a veces no. Aprende a olfatear cuando Sí y cuando No, y cruza como un bólido
2.- Hazte invisible, cruza entre los vehículos cual si tú flotaras.
3.- El espeso retrovisor es un estorbo para pasar entre los vehículos, quítaselo a tu motor.
4.- No debe importarte que tu motor no tenga luces, total, este país vive a oscuras y todos seguimos respirando.
5.- Olvídate de que la carrocería eres tú. En el Darío Contreras hacen milagros.
6.- No le des mente a manejar de noche a gran velocidad, total, de noche todos los gatos son prietos.
7.- Mantén la distancia, no permitas que ningún carro te alcance, ¡dale duro, dale duro, mucho más!
8.- “Irse en rojo” no es un delito, lo hacen funcionarios, militares y policías, incluso alguno de la AMET, ¿por qué no puedes tú?
9. Si manejas mientras llueve, aumenta la velocidad, si te caes, el “guayón” te duele menos. Cuando te deslices, canta la un trozo de la canción de Julio Iglesias. “Llueve y está mojada la carretera…”.
10. No utilices el casco protector, ¿para qué tienes la cabeza?
11. La vida es una paradoja, tú andas sin placas, y el señor Juan Ramón Gómez Díaz tiene miles. Así que no le des mente.
12. Recuerdas, puede montar hasta cinco personas en tu motor. En los circos montan hasta diez en una bicicleta. Ahora bien, pídeles que mantengan el equilibrio, pues, si se caen el “guayón” es multitudinario y colectivo.
13.- Aprende a calibrar el motor y hacer “willis”, total si dejas medio pellejo en la pavimento, lo dejaste echando vainas y divirtiéndote.
14. La mejor forma de evitar los tapones y llegar rápido es subiéndote a las aceras. A los peatones que se quiten del medio y cojan la calle.
15. Finalmente, no te preocupes por el brochazo de menthiolate, luego de un fenomenal deslizamiento donde llegaste “¡safe!” en una calle o avenida, porque en los hospitales a veces ni eso aparece. Si te dan el brochazo, cuídate, pues la próxima vez la muerte te puede cantar ¡out!
Exelente trabajo; una realidad con una pizca de humor. Good job, hermano JOSEPH.
ResponderEliminarEl mejor escrito de Orlando Holguin en un buen tiempo.
ResponderEliminarLa mejor fue:
11. La vida es una paradoja, tú andas sin placas, y el señor Juan Ramón Gómez Díaz tiene miles. Así que no le des mente.
Jajajajajaja!