Semana Santa al estilo dominicano
Por Miguel Melenciano
Como cambian los tiempos Venancio, qué te parece?… qué te parece Venancio, como cambian los tiempos?. Así reza el estribillo de una popular canción de los compadres de Cuba, que precisamente en este tiempo, en donde se recuerda la crucifixión, muerte y resurrección de Jesús, nos obliga a reflexionar, en el antes y el ahora de esta recordación.
La celebraciones de esta tradición para la iglesia no ha cambiado, pero para el pueblo si ha variado muchísimo. La iglesia Católica continúa con su Domingo de Ramos, lavatorio de pies, la visita a los siete templos, víacrucis, procesión del silencio, etc. O sea no ha variado la forma de conmemorar la pasión de Jesús de Nazaret.
Sin embargo, el pueblo por el que Jesús ofrendó su vida, le ha dado un giro a la conmemoración de la Semana Mayor, al parecer, con una interpretación de las escrituras bíblica a su manera, lo que es considerado por los religiosos, un pecado capital.
Por ejemplo, la Procesión del Silencio. Los dominicanos se levantan silenciosamente en la mañana del Viernes Santos, llenan un bulto con traje de baño, dos potes de ron, un caldero de espagueti con salami y unos cuantos panes entre otras chucherías. Unos se van en su carro privado, y otros se ven obligados a tomar transporte colectivo, y mientras se dirigen a la playa, van reflexionando sobre la política o el juego de pelota.
La tradición que se acostumbraba antiguamente el Sábado de Gloria de tirarle agua a la gente que pasaba por la calle, ya que en tiempos pasados era pecado bañarse en Semana Santa, antes del Sábado de Gloria, los dominicanos para que no les tiren agua, no esperan el sábado, y se van para los diferentes balnearios el Viernes Santo.
Después de pasarse el Viernes Santo en la playa, según la tradición el Sábado Santo, este es un día donde las personas deberían permanecer en sus casas, prácticamente sin hacer nada, y sólo se acostumbraba a rezar el Rosario. Los dominicanos ese día se la pasan con una resaca del carajo, y pensando cómo pagarán la renta, pues gastó lo que cogió prestado en la bemberria del Viernes Santo.
La tradición de la visita a los siete templos. Esta visita la hacen los funcionarios, políticos, empresarios a las queridas, una por día, durante los siete días de semana Santa. Con este peregrinar simbolizan el ir y venir de Jesús.
El Vía Crucis vivientes, esta simbolizado por la interminable fila de automóviles que arman los Amet en las carreteras del país para proteger vida a los cristianos que se dirigen hacia la capital, después de celebrar la Semana Santa.
Después de una Semana Santa llena de tradiciones y costumbres, llega la gran fiesta. ¿Quién no se hace la ilusión de que llegue el domingo de Pascua? Muchos niños esperan este día para disfrutar de los huevitos de pascua. Los niños que apunten para otro lado, si creen que van a jugar pintando un huevo con lo caro que están. Con ese huevo se va a comer el domingo, pues la Semana Santa dejó al padre esperando el lunes para volverse a enganchar con el prestamista.
Nuestro pueblo sabiamente, ha sabido cambiar, y adaptarse a los cambios, sin que estos afecte sus creencias cristianas, así como su acérrima fe en nuestro creador. Simplemente trata de vivir, entre la modernidad y la tradición.
Miguel:
ResponderEliminarEn nuestro pais, que yo recuerde, no se usa como tradicion los Domingos de Resurreccion recoger huevos. Eso es aqui en los EUA.