Joseph Cáceres

No solo de pan...ties vive el hombre….

Este año se cumplen 40 de la celebración de Siete Dias con el pueblo, el más grande e importante evento artístico de corte social y revolucionario que llenó por completo el estadio Olímpico, por primera vez, y que acogíó a las más importantes figuras de la nueva canción y el nuevo canto.

Para hacer posible tan magno evento, irrepetible en la historia del arte popular dominicano, fue necesario el apoyo de la prensa, en esa época representada primordialmente por el periódico El Nacional,  y la revista Ahora, los medios de comunicación más vanguardistas en eso tiempo.

(No se olvide que la imprenta de la revista Ahora fue volada por una bomba terrorista,  con la que se trataba de impedir el flujo de las ideas contestarias)

Publicación a pagina completa calzada con nuestra firma en El Nacional

Como cronista de arte, editor de espectáculos de la Revista Ahora, dirigida por Orlando Martínez, y encargado de las páginas de arte popular de El Nacional, nos correspondió desarrollar una labor de información al más alto nivel, en respaldo a la iniciativa de la Central General de Trabajadores (CGT), organizadora del encuentro, venciendo obstáculos, vigilancia y represión del gobierno de los doce años del doctor Joaquín Balager.

Como muestra, ahí están recortes de El Nacional de esa gloriosa época, donde importantes trabajos de primera plana y de páginas completas fueron calzados con nuestra firma, diariamente, minuto a minuto, en una jornada que conllevó a que en todo momento estuviéramos junto a los artistas internacionales que participaron en la jornada.

Hacen 40 años, pero mantenemos la frescura de aquellos días en que junto al inolvidable Orlando Martínez andábamos en correrías con los artistas que participaron en el evento.

Pi de la Serra,  Ana Belén y Víctor Manuel,  de España, Silvio Rodríguez y Noel Nicola, de Cuba;  Lucecita Benitez, Danny Rivera, Antonio Caban Vale “El Topo”, de Puerto Rico;  Mercedes Sosa,  y Bernardo Palombo de Argentina; Los Guaraguaos de Venezuela; Roberto Darvin de Uruguay; 
Guadalupe Trigo, de México.

Del país Expresión Joven con Ramón Leonardo, Manuel de Jesús y Chico González; el grupo Nueva Forma con Sonia Silvestre, Victor Victor, Claudio Cohen y Tomás Oviedo; elGrupo convite con Luis Díaz, de igual manera Alta Voz, y la Rondalla Universitaria.

No eran grupos de nueva canción, pero estuvieron siempre identificados con la causa del pueblo, y por ello participaron Cuco Valoy en tanto que Johnny Ventura,  estreno allí el tema “Mamá Tingó”, la líder campesina asesinada en esos días.

Tras el extraordinario éxito del evento, El Nacional lo desplegó a página completa, que nos dividimos con
Bonaparte Gautreaux Piñeiro y Antonio Espinal. El escrito de la derecha con el título "Un Verbo Lleno de Esperanza",
está calzado con nuestra firma. 

No pretendemos contar una historia del evento, pero en modo alguno podemos dejar de mencionar a los artífices de ese encuentro con  la canción comprometida.

Los organizadores Enrique de León, Nélsida Marmolejos, Ramón Paulino, Francisco Antonio Santos y Julito de Peña con la producción artística de Cholo Brenes.

El éxito del evento fue tan grande, que el gobierno de Balaguer se sorprendió de aquello, pues aparte de la jornada en el Olímpico a casa llena, hubo presentaciones en Santiago, San Pedro de Macorís,  Palacio de los Deportes, Parque Eugenio María de Hostos y UASD.

Recuerdo que al final de la jornada nos llevábamos a los artistas a compartir actividades sociales hogareñas, donde la comida que se servía eran hot dogs caseros, en medio de tertulias muy animadas, mientras en las afueras de las casas donde nos reuníamos los agentes de la policía vestidos de civil merodeaban y nos vigilaban.

Orlando Martínez con Ana Belén y Victor Manuel en un
encuentro familiar luego de la jornada, con el traguito de ron
en la mano. 

Se vivieron momentos de mucha tensión, porque el evento le enseñó al régimen la capacidad de convocatoria de los grupos sociales y artísticos que denunciaban el sistema. El gobierno de Balaguer entró en pánico, con con esa demostración, y ya “con el palo dado” montó un operativo de represión.

Migración le dio  un ultimátum a los artistas que participaron en el evento para que se marcharan del país, y todos los visitantes tuvieron que recoger y marcharse.

Eso si, que nos dimos gusto denunciando el hecho en las páginas de El Nacional y de la revista Ahora, con la anuencia de Orlando Martínez y el doctor Rafael Molina Morillo, a la sazón propietario de Publicaciones Ahora.

Hemos querido recrear nuestra participación en esa jornada histórica, asumiendo grandes retos y compromisos, para ilustración de aquellos que piensan que lo único vaporable en el arte es hablar de los panties y los escándalos de las desacatadas megadivas.

No solo de panties vive el hombre…