Banalización de la cultura
Hace un par de años el escritor y premio Nóbel de Literatura Mario
Vargas Llosa, escribió un ensayo titulado “La Civilización del
Espectáculo”.Escribió esta obra porque sintió que estaba siendo estafado cuando visitaba algunas exposiciones, leía ciertos periódicos, veía alguna película, leía algún libro o simplemente decidía sentarse en su sofá para ver un programa de televisión.
Le hicieron creer que “un fraude era arte; un embuste, cultura” y “como no hay manera de saber qué cosa es cultura, todo lo es y ya nada lo es”, dijo en una entrevista al periodista Jan Martínez Ahrens.
En ese sentido, donde quiera que dirijamos nuestra mirada apreciamos frivolidad, banalidad y una mediocridad sin paragón. Enciendes la televisión y te das de bruces con una pléyade de mujeres y hombres que se autodefinen “comunicadores” sin tener un ápice de lo que significa esa palabra y ajustados a la ley del mínimo esfuerzo. Del lenguaje corporal son expertas.
La televisión es imagen pero no exhibicionismo. Creen que comunican que son entes sociales y en realidad, son papagayos parecen vedettes.
Eres testigo de programas de poco contenido y respeto al televidente; no importan las escenas de violencia, los bailes candentes en horas de niños o el uso del lenguaje soez tanto en ese medio como en la radio a cualquier hora del día. Entrevistan a personajes que no aportan nada pero lo tienen sentados ahí.
En la radio igual, programas pésimos de mala calidad desde tempranas horas del día, personajes metidos a “periodistas”, pagados por partidos políticos sin el menor sonrojo en sus caras. Personas que uno no se explica cómo es posible que le hayan dado un espacio radial a tan mala manera de hacer radio o tv ¡!!!
En este “boom” del cine dominicano hay “directores” de cine que lo único que presentan es basura visual aunque nunca lo admitan. Si eres cantante aunque no tengas voz tienes que ser la que más mueva las nalgas para conectar con ese “público” si no, no estás en nada. Esta frivolidad y banalización donde todos se creen lo que no son, pone de manifiesto lo peor del ser humano.
Alarmante y deprimente es que todos estos sujetos de nuestra sociedad en el espectáculo, la política y demás medios son admirados por una gran cantidad de jóvenes que por supuesto desconocen lo que es la calidad profesional.
Estos individuos que en su mayoría no saben lo que es comenzar una carrera desde abajo e ir escalando peldaños poco a poco son los ídolos de muchos. Como en todo, hay excepciones buenas y de calidad, pero se cuentan…
En la actualidad, estamos siendo estafados por la mediocridad, por supuesto de nosotros depende lo que consumimos. La banalización es la epidemia de la modernidad.
Como dijo A.P. Chéjov, “ No hay nada más terrible, insultante y deprimente que la banalidad”.(Dunia de Windt-El Día)
como este blog, en eso se ha convertido.
ResponderEliminarEstas enojado con este blog?
EliminarHabló bueno y bonito pero, igual no dijo nada nuevo, no aportó nada,lo que todos repiten, Sra.(ta)Dunia diga por lo menos tres o cuatros programas y presentadores(a) malos.,y perdón sino no está comunicando nada.
ResponderEliminarTu bebes pastillas para la depresion?
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