Joseph Cáceres

De seguir como va, la televisión de producción nacional desaparecerá

Por Johnny Arrendel

La televisión de producción nacional va en franco declive en la República Dominicana y podría desaparecer en los próximos años, sino por completo, al menos en su variedad de entretenimiento y variedades, mientras  que la vertiente informativa real no existe en la práctica desde hace tiempo.

Julio Martínez Pozo, comentarista estelar del programa radial El Sol de la Mañana, dice tener informes de que, además de los que se han producido, vendrán más cambios,  desapariciones, modificaciones y recortes de horario en las parrillas de los canales de televisión abierta del país.

Algunos observadores pasarán por alto, o tal vez pensarán, que este fenómeno se circunscribe al mercado local, pero es preciso tomar en cuenta el carácter global del asunto.

Lo resalta la firma internacional de servicios profesionales Deloitte, en sus “Predicciones para 2013”,  un informe que elabora cada año donde analiza las principales tendencias para los próximos meses en los sectores de Tecnología, Medios y Telecomunicaciones

Deloitte preveía una reestructuración de los canales públicos en la mayoría de países avanzados, debido a la reducción de subvenciones y reajuste de presupuestos, mientras que la caída de los ingresos publicitarios obligaría a los canales privados abiertos a cambiar de estrategias.           

Reporta que  el porcentaje de penetración de la televisión de pago en los hogares de España es del 25%, frente al 48% de Reino Unido o el 41% de Francia, debido a que los canales en abierto de la Madre Patria han contado con bastante contenidos premium disponibles, pero el nuevo estatus pone ahora a los operadores de televisión de pago en condiciones de conseguir esas producciones a precios más reducidos.

Si reflejamos esa realidad mundial al mercado dominicano, tenemos que verdaderamente, muy pocos productores nacionales estarían en capacidad material de aportar contenidos calificables como “premium”, y por tanto que la televisión local abierta se inserte en la tendencia basada en ellos.

Si bien, la televisora pública, CERTV, hace tiempo que no compite con los canales comerciales, el Estado Dominicano venia subsidiando la producción televisiva nacional a través de la publicidad de sus distintas instancias, pero la inversión en ese reglón se reduce notablemente desde hace dos años.

Se reconoce, además, que las empresas privadas que por tradición y por su tamaño invertían mayores montos en publicidad a través de la televisión, se dirigen ahora a otros medios masivos, como el cine, o simplemente, redujeron de manera sensible sus partidas para esos fines.

Es decir, que los televidentes de ingresos medios hacía arriba en la República Dominicana se han tornado más exigentes en sus gustos, ya que los servicios de televisión por cable, satelital o vía internet (Netflix), presenta contenidos en variedades, entrevistas, películas, documentales, animados, reportajes y noticias, que copan todas sus expectativas.

También hay que tomar en cuenta que los grandes estudios de producción cinematográfica, al tanto del importante pastel que representa la televisión por pago, se han lanzado de lleno a la realización de series, que actualmente dominan la teleaudiencia en casi todo el mundo.

Por otra parte, los dispositivos cada vez más sofisticados, como Smart TV y 3-D, implican a su vez, que el público tienda a ubicar mejores contenidos que se ajusten a esas modalidades que se generan en países avanzados.

Deloitte valora, también, la llegada de la nueva generación de televisores de Ultra Alta Definición, conocidos como 4K, con una resolución cuatro veces mayor que la actual Alta Definición de mayor calidad.

La actualización a esta nueva tecnología efectiva en los campos tecnológico y comercial, implicará grandes inversiones en los grandes mercados por parte de  las cadenas de televisión, productoras, fabricantes de televisores, propietarios de infraestructuras y consumidores.

Hasta ahora, se han lanzado algunos modelos de televisores correspondientes a esta tecnología, pero a precios muy elevados.

Con relación a las noticias en la televisión dominicana, será tema para otro trabajo, pero la realidad indica que en los medios electrónicos dominicanos (radio y TV), no se genera verdadera información útil como tal, sino que predomina, y más bien sobra, la opinión.