viernes, 25 de julio de 2014

REVELACIONES DE RAMON ORLANDO:
Dice que la Tribu de Cuco Valoy fue un fenómeno irrepetible y que la salsa criolla entró camuflada al mercado
Por Johnny Arrendel
Ramón Orlando dictó una conferencia verdaderamente Magistral en el Centro Cultural Banreservas.
Demostró Ramón que como Yaqui Núñez, el maestro dominicano de la oratoria, “es capaz de improvisar las palabras”, y es porque genera ideas que las sustentan.
El también pastor de dos congregaciones evangélicas se apoyó en su formación académica y vivencias para ofrecer una charla que, como ya referí, no fue escrita de antemano, pero resultó en una experiencia aleccionadora para el público.
 ¿Por qué el reflujo de la música dominicana?
Para Ramón Orlando Valoy, los prejuicios con que se manejaba hasta hace poco tiempo el Conservatorio Nacional de Música constituyen factor preponderante en la mala calidad que prevalece en las expresiones musicales que se generan el país.
Atribuye a ese entuerto el que los exponentes locales carezcan de las herramientas elementales para producir buenos temas.
Recordó que desde hace tiempo corre el rumor de que su colega Bonny Cepeda fue expulsado del Conservatorio por tocar melodías populares al piano cuando estaba matriculado en esa institución.
“Tengo que preguntarle a Bonny, lo que sé es que conmigo, con Manuel Tejada y con Maridalia Hernández no pudieron, finalmente completamos nuestros estudios allí”, subrayó.
Ramón Orlando es graduado de Maestro de Música y de Concertista, título este que para conseguirlo debió prolongar su tiempo de estudio a 16 años, de 12 que como mínimo estipula el pensum, debido a sus compromisos de entonces en la orquesta La Tribu, de su padre Cuco Valoy.
 Actitud Absurda
Ramón Orlando señala que la tozudez de los antiguos directivos del Conservatorio no tuvo resultado práctico, ya que sería excepcional que un músico dominicano logre impresionar en Berlín, Viena, Paris, Roma, Londres, entre otras cunas de la música clásica, si se limitase a interpretar creaciones de los grandes maestros.
Entiende, que siempre que un instrumentista dominicano o de otra nación de América Latina visite alguna ciudad del Viejo Mundo, lo más natural es que  los exponentes locales le pidan interpretar la música de su país, “pero eso nunca lo comprendieron los directivos del Conservatorio”.
Se sobrepuso al bloqueo
En 1997, el reputado director José Antonio Molina invitó a Ramón Orlando a colaborar en un concierto que proyectaba para el Teatro Nacional con las participaciones, además, de un acreditado músico estadounidense y de la extraordinaria cantante criolla Maridalia Hernández.

La dirección recibió complacida la solicitud de fecha para el concierto de Molina. Le pidieron detalles del programa, todo iba bien cuando José Antonio detallaba su intervención al frente de la Orquesta Sinfónica Nacional, la del norteamericano y de Maridalia, pero cuando llegó a lo de Ramón, inmediatamente se interrumpió el encanto.

La directiva del teatro puso de pretexto que no había disponibilidad de patrocinio. Decepcionado, Molina le explicó a Ramón que su sola mención provocó el colapso.

Sin embargo, Orlando aceptó el reto de buscar patrocinio por su cuenta. Se montó el concierto, el hijo de Cuco Valoy realizó su gran debut como concertista de piano, al presentarse nada menos que con la Orquesta Sinfónica Nacional de la República Dominicana.

Orlando mostró su faceta oculta. Su ejecución de la Rapsodia en blue, de Gershwin, conducida por José Antonio Molina, fue extraordinario, y los mismos directivos que le objetaron le felicitaron efusivamente, le calificaron como: “un músico altamente preparado, poseedor de las técnicas pianísticas más depuradas”.

Poco después, estuvo en el país un músico cubano brillante y de enorme prestigio internacional, Frank Fernández, cuya visita despertaba gran expectativa entre los seguidores locales del arte culto.

Fue grande la sorpresa de quienes acudieron a recibir al cubano, ya que lo primero que expresó fue su interés en conocer a Ramón Orlando. Resulta que, en Nueva York, se había interesado en el trabajo del criollo al escuchar las fusiones que realizaba al frente de la Orquesta internacional.

Cuando se reunieron, Fernández aconsejó a Orlando que nunca abandonara los ritmos vernáculos, ya que la genialidad de un músico radica precisamente en combinar el dominio de lo clásico con lo popular.
La grandeza de Cuco
Ramón Orlando pondera la actitud progresista de su padre, el gran Cuco Valoy, quien le encaminó a formarse como músico.
Recuerda que el mote de “Cuco” se originó cuando el entonces bisoño nativo de Manoguayabo emigra a la capital y es reclutado como trabajador domestico para la casa de señora en un sector de la parte alta.
En una formación de los nuevos empleados, la matrona preguntaba los nombres respectivos, y al llegar donde Valoy él contestó que se llamaba Pupo, pero ese apelativo no le gustó a la jefa quien le ripostó que en lo adelante se llamaría Cuco.
Una estampa que en algún momento le contó su padre, refiere que con apenas dos o tres años de edad, el pequeño Ramón tomaba las maracas y  con destreza inusitada seguía el ritmo de las piezas que ensayaba el conjunto de cuerdas sonero “Los Ahijados”, que integraban Cuco y su hermano Martín Valoy.
Observador, Cuco Valoy anotaba, un día, cuando Ramón tenia unos diez años, le pregunto: “¿Sabes cantar?, el pequeño respondió positivamente y entonó una melodía, -“Vas a estudiar música”-, respondió su progenitor.
Cuco Valoy, quien se alfabetizó por cuenta propia ya cumplidos los 15 años de edad, impartió a su hijo Orlando las primeras clases de música ayudándose de un viejo manual del método Pozzoli.
Luego, lo condujo donde la maestra Floralba del Monte, y así comenzó la historia que le llevo a graduarse en el conservatorio.
 La Tribu, fenómeno irrepetible
La Tribu de Cuco Valoy fue la única orquesta en ejecutar, indistintamente y a la perfección el merengue dominicano y el son montuno internacional, “y esa dualidad no se repetirá jamás”, sentencia el maestro Ramón Orlando Valoy.
Refiere que La Tribu fue la primera banda dominicana en penetrar y lograr verdadero éxito comercial en grandes mercados de Latinoamérica, como Colombia, Venezuela y Curacao, y no circunscribirse únicamente a las plazas de Nueva York y Puerto Rico.
Sostiene que la banda dominicana fue la precursora e inductora de la salsa colombiana, y por eso, tanto él como su papá, y en rol de vocalista, Henry García, son respetados y hasta venerados en ese mercado.
Al insistir en que La Tribu fue un fenómeno que no se reeditará, Orlando puntualiza que con la misma destreza que la banda ejecutaba el son montuno, interpretaba el merengue, e incluso, sus integrantes  montaban un show en las tarimas que incluía disfraces y utilería para entretener al público.
La extinción del arreglista
El maestro Ramón Orlando observa que una tendencia sumamente negativa, es que en la actualidad, productores y exponentes carentes de formación musical suprimen las ideas de los verdaderos arreglistas en las piezas que se lanzan al mercado.
Empero, confiesa que los orquestadores se han dejado arrastrar de esa distorsión, porque los productores y cantantes que se creen sabelotodos son quienes llevan el dinero, “y muchas veces lo que suena y se  le atribuye a un arreglista es en realidad el invento de un improvisado”.
Salsa dominicana penetró camuflada
En algún momento, Ramón Orlando tuvo la motivación de grabar un par de temas de salsa, pero de repente una incertidumbre inundó su cabeza: “De ningún modo los programadores criollo aceptarían y darían curso a semejante invento”.
Hablamos de una etapa en que el mercado de la música tropical en el país lo acaparaban los exponentes boricuas, y en modo alguno existía la apertura para sonar a los mismos dominicanos como salseros.
Por tanto, Ramón desitió de ponerle voz al tema, llamó a su guierero Tony Sexapeal, y le inquirió si se atrevería a grabar “La Llorona”, que tenia en carpeta el prestigioso director, compositor y arreglista.
Totalmente sorprendido e incrédulo, Sexapeal tomó la alternativa, más Ramón Orlando le advirtió que cuando llevara el tema a las emisoras, debía mentirle a los principales locutores de salsa, y decirles que cantó en una producción grabada en Nueva York por iniciativa de colaboradores de Sergio Georges y Marc Anthony.
El resultado fue que, bajo esa premisa, de que Sexapeal apenas puso la voz, pero que La Llorona era producida por la gente de Nueva York, “que si saben de salsa”, la composición y arreglo de Ramón Orlando, grabada en su propio estudio, se pegó con fuerza en la radio local y propició que se posicionaran los salseros del patio.

8 comentarios:

  1. Aramis camilo tambien fue un fenomeno irrepetible con un formato novedoso , con personalidad propia y teniendo varias canciones pegadas en la radio al mismo tiempo. Toño rosario tiene influencia en parte de ese fenomeno.

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  2. la orquesta de cuco valoy,pego mucho temas por la ingenuidad de RAMÓN ORLANDO.porque la tribu de cuco valoy sin ramón orlando nunca había pegado un tema,así que yo felicito a ese gran maestro de maestros don RAMÓN ORLANDO,por ser un gran músico dominicano

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  3. anonimo 19:17 ingenuidad? sera genialidad, barbaraaso.

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  4. A vamos a buscar a mateo san martin y a bienvenido rodriguez que fueron los que en realidad pegaron el merengue...mateo escuchaba musica de toda latinoamerica y se la pasaba a fernandito y a johnny ventura.....karen record controlaba en merengue antes de dedicarse unica y exclusivamente a juan luis guerra....esos dos fueron los verdaderos maestros de los 80s.....no han surgidos relevos para esos empresarios l disco.....necesitamos a karen record y a kubaney de regreso.....ramon orlando tiene mucho de ofrecer al igual que manuel tejada.....andres de jesus arreglo muchis exitos tambien

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  5. no pero le robaron la imagen al pita. y esta comentando otro..

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  6. Eso de que la salsa criolla entro camuflada a la radio dominicana es un criterio que no se puede generalizar y ademas, es una vision desacertada...Hay salsas que le anteceden a esta que produjeran Ramon y Sexapeal que a sabiendas de que han sido de manufactura local han pegado fuertemente,porque han cumplido con los requisitos que determinan cuando un tema es un "palo" dentro de los consumidores de salsa;sin tomar en cuenta si es de aqui,de alla o de aculla.algunos ejemplos:Juliana(Cuco Valoy);El hijo de Madame Ines(Bonny Cepeda);Puchula(Los Hijos del Rey);Triunfare(Los Kenton);Nacio Varon(Ramon Orlando y la Tribu)y unas cuantas mas por ahi.

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  7. DANIEL MARTINEZ desde boston creo respecto a cuco valoy que hiso su trabajo a porto mucho a nuestra música creo también que es merecedor de un soberano pero hace tiempo

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  8. El salsero que más fuerte pego en el país fue raulin Rosendo y ustedes ni lo mencionan.

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NIURKA BAEZ,
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