¡Que Dios te proteja, Niní!
Qué bueno que el Ministro de Cultura José Antonio Rodríguez le salió al frente a la avisa campaña que le han montado a Niní Cáffaro, primero de manera solapada, y ahora en forma abierta y descarada, para desacreditar su gestión y hacerlo saltar del cargo.Hoy en la radio y diferentes medios hubo manifiestas declaraciones de apoyo a Niní, como la de José Antonio Aybar en su programa Vacilando la Tarde.
Lo de colocar lona en el escenario del Teatro Nacional para supuestamente evitar que se mojara con las goteras provocadas por la lluvia, se advierte que era parte de un show montado con premeditación y alevosía para provocar un escándalo frente al público.
Mucho más cuando se tuvo el atrevimiento de agitar a los presentes en contra de la dirección del teatro, culpándolo de una situación prevista, que no era una sorpresa para nadie, porque precisamente el teatro debió ser cerrado hace tiempo para proceder a darle un mantenimiento profundo.
Niní Caffaro cometió un error al pedirle al Ministerio de Cultura, que no cerrara la sala para someterla a mantemiento, con el fin de darle oportunidad “al dueño del teatro” de que montara los eventos que ya tenía programados.
En vez de agradecer ese gesto, de un hombre serio, leal, amigo, lo que se ha hecho es morder la mano del que le de comer denunciando y exagerando una situación por la cual precisamente el teatro tenía que ser cerrado para su reparación, luego de la entrega del pasado Soberano.
Si se hubiera hecho eso, no hubiera ocurrido un acto tan penoso y bochornoso, propio de gente que se maneja sin ningún escrúpulo.
Una sala construida para el arte culto y las más elevadas manifestaciones culturales, ha sido tomada por empresarios privados para presentar artistas de night clubs y cabarets como si fueran grandes luminarias del arte, que es parte de la distorsión que allí han creado, al usar el teatro como si fuera un feudo o propiedad particular.
Como también el tema del bloqueo y el manejo privilegiado de fechas en el calendario y lo declarado por Niní en torno al mercado negro.
Es la parte que subyace del iceberg con la que se quiere hundir el barco. No nos llamemos a engaño.
Veo con pena a Niní, quien llegó al teatro luego de 21 años como administrador del Servicio Nacional de Malaria, y 27 años en la gerencia de Relaciones Públicas de la Cervecería Nacional Dominicana, donde se destacó por su buen desempeño, capacidad y seriedad.
Y digo que lo veo con pena, porque no le será fácil lidiar con el enemigo en las entrañas del mismo teatro, maquinando y articulando planes siniestros, sin ningún temor ni rubor, con el fin de hacerlo saltar del cargo, empleando malas artes, como las que se pusieron en evidencia el fin de semana.
Que Dios te acompañe y te proteja del mal, Niní.


No entiendo como es possible que el señor Suarez haya tenido todos estos años controlando el teatro nacional, sin que nadie haga nada eso es inaceptable, como han permitido eso, eso no se ve en ningun pais del mundo.
ResponderEliminarEse personaje es de lo que se cree que el pais es una finca que el compro. Ya es tiempo que lo pongan en su lugar, falta de respeto. Charlatan.
ResponderEliminary lo grande es ese publico "culto" que abucheo a nini.
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