Ay si las vacas volaran...

Australia.- Inesperada y también impactante resultó ser la revelación que realizó la reconocida periodista Amanda Goff en la pasada edición del programa de James Thomas “Sunday Night”.

Y es que la presentadora de noticias en Australia reconoció que desde el 2012 llevó una doble vida, pues se desempeñó como periodista, pero también ocupó su tiempo como dama de compañía de altos ejecutivos de Sydney.

Según relató Goff, ella siempre tuvo una vida sexual activa, siempre le atrajo la industria del sexo y que luego de separase en el 2012 de su marido, un banquero, y de llevar una vida aburrida en lo profesional decidió probar cómo le iba con una de sus fantasías más eróticas: cobrar por sexo. Y para Goff la experiencia fue especial.

Ella misma reconoce que la primera experiencia la marcó y que desde ahí se transformó en Samantha X de noche. Contó que la primera vez que lo hizo cobró 450 dólares, cerca de 250 mil pesos chilenos, en uno de los lugares más “selectos” de Australia.

Pero que luego de un tiempo, Goff decidió independizarse del prostíbulo en el que trabajaba y ahí todo comenzó a ser mejor en términos económicos, según  publicó el periódico elheraldo.hn.

“Me acostaba con menos hombres a los que le cobraba más”, reconoció la periodista. A tal punto llegó el “negocio” de Amanda Goff que señaló que puede ganar hasta 5 mil dólares (más de 2.5 millones de pesos chilenos) por noche.

Goff tiene dos hijos con el banquero del que se separó, por lo mismo es que su familia no ha reaccionado nada de bien con la revelación de su doble vida.

El exmarido de Goff le recrimina que cómo le van a explicar a sus hijos que su mamá es una prostituta. Ella responde que todavía son chicos y que sólo saben que su mamá es “especial”.

En la misma línea, Goff señaló que desde hace un tiempo se han escrito cosas ofensivas en contra de su persona, pero que a ella le da lo mismo que el resto hable de su vida, que hoy no está trabajando como prostituta, pero que cuando quiera y le apetezca hacerlo simplemente lo hará.

Por lo menos esta periodista se sinceró y lo soltó todo…Lo mismo no puede decirse de “comunicadoras” criollas que usan la televisión como pantalla para promover  su figura, como objeto del deseo, que luego se traduce en salidas con empresarios, políticos, diplomáticos, altos militares, funcionarios del gobierno  y turistas extranjeros.

¡Y cuidado quien hable de ellas, honorables damas, que no rompen una taza en su casa!

La gente del medio se queda por las ramas y solo hablan de las llamadas “chapeadoras”, sin percatarse de que el negocio que se esconde es más grande de lo que cualquiera se puede imaginar.

Muy bonitas, bien avitualladas, vestidas y montadas, pero no “en el carrito de Don Fernando, un ratito a pie y otro caminando”.

Se montan en funcionarios de Inespre aficionados a sexo servidoras de la televisión  que cobran 50 mil pesos por salida, sin contar al líder belicoso del PRD que le regala a las mujeres Mercedes Benz....  el dueño de casinos que hace fiestas  tipo harén árabe alrededor de una piscina, el empresario que usa los servicios de la “torre de las modelos” de la Avenida Anacaona...  el “dealer de mujeres” que quiere sustituir a Bianka la Gorda  que opera en los predios del Cigarro Café, que a veces anuncia especiales de sus mujeres por catálogo,  sin contar los fashionistas “deliverys” que transportan mujeres a villas de Casa de Campo de la Romana donde los clientes pagan en dólares.

Y hasta hay una, cuya especialidad es el sodomazoquismo que tanto le gusta practicar al ministro que despues de las doce de la noche se convierte en La Cenicienta.

Lo sabemos todo muchachas, "pero no se preocupen, no lo voy a revelar...lo quiero conservar a mi manera..."

¡Ay si las vacas volaran!