En los años noventa surgieron en el país dos establecimientos que se dedican a la fabricación de cereza artesanal, en la avenida Winston Churchill y otro en la Kennedy.
Podía usted disfrutar de cervezas de buen cuerpo y sabor fabricadas en el mismo lugar, como parte de una variante gourmet, por el maridaje.
Pero esos establecimientos cerraron, con lo cual nos perdimos de esos locales que enriquecían las posibilidades degustativas y del paladar para quienes buscan variaciones y disfrutar nuevas experiencias.
En apartados pueblos españoles, entre ellos la comunidad de Castilla, La Mancha, aparecen estas cerveceras artesanales muy particulares que vale la pena visitar.
Algo que aquí teníamos antes, ahora se disfruta como una novedad, cuando se viaja y se deja atrás la ciudad, lo que se traduce en una experiencia memorable.
Gusto da visitar los viñedos, en la época de la vendimia, y degustar vinos en jarra, como se hacía en locales rupestres en siglos pasados.
Navegar en el tunel del tiempo en viejas tabernas conservadas por familias atadas a rancias y añejas generaciones de gente que ya se marchó, y que han dejado un legado patrimonial que nos hace posible disfrutar de la magia y el agradable sabor del encanto.
Joseph el de la Churchill era BeerHouse !
ResponderEliminarPero el de la Kennedy, ¿Era Barley's? Que después fué Mónaco?