Mitos y leyendas...

El que bebe Brugal pelea o….

En torno al Ron Brugal se ha creado el mito  del que lo toma termina peleando o haciendo el amor.
En realidad la creencia no es más que una leyenda articulada por la boca de la gente, atribuyéndole a este ron dominicano propiedades que en nada distan de las que pudiera desencadenar la ingesta de cualquieer otro ron.

Pero la gente le ha acuñado, para bien o para mal, esos atributos.

El cantante Braulio en una ocasión en que visitó el país se fue de juerga con una conocida productora de programa de televisión de investigación con la cual se le atribuía un romance.

Al día siguiente, le tocaba cantar en el programa Enhorabuena con Yaqui, y se nos asignó presentarlo.

Mientras esperaba en el set un cambio de comerciales para anunciar su actuación nos comentó que estaba medio resacado todavía porque la noche anterior habia estado tomando Brugal.

-¿Tú sabes lo que dicen tiene que hacer el que toma Brugal?- le pregunté, creyendo que "me la iba a comer" respondiéndo yo mismo la pregunta, porque él no iba a saber.

Pero el tiguerazo de Braulio de inmediato dijo:
-¡Yo no peleo!.
Es decir, que hacía "lo otro"...no peleaba.

O sea, que la fama había traspasado fronteras, aunque puede ser que Braulio lo haya aprendido aquí con la gente.

El caso es que la marca, después de todo, se ha beneficiado de la propaganda machista que le han hecho, a un punto tal que no la han podido bajar del primer lugar de venta, aunque otros rones como Barceló y  Macorix, han estado atacando fuertemente.

Pero, ¿de dónde realmente viene ese mito del dominicano con respecto al Ron Brugal?.

La explicación que se nos ocurre es la siguiente.

La bebida que sí se ha establecido  que posee propiedades afrodisíacas y excitantes es la champagne.

No en vano en las citas de amor, etiquetadas hasta en las películas, el amante cuando llega a la habitación de la casa o del hotel, lo hace siempre con una botella de champagne para el brindis en pareja, como parte del ritual amatorio.

El champagne es la bebida de las citas romanticas y de los encuentros amorosos, pues estudios que se han hecho determinan que produce un efecto  excitante, enervante,  que despierta el líbido de las mujeres, acelerando cualquier proceso de sedución.

Pero, imagínense, al dominicano común no tener acceso a la espumante bebida francesa, por su alto precio, se ha inventado el trasladar sus cualidades al Ron Brugal.

Porque aquí, como se sabe, "el que no se apea, se jondéa".

Pero lo de las propiedades afrodisíacas del señalado ron  está en veremos.

Lo que si seguro es que su ingesta pone a la gente a ver  a los policías "chiquitito team band", y su consumo en exceso es el causante de tremendos pleitos en bares, discotecas, colmadones, reuniones de amigos...

De tal manera, que buscando una "excitación", a las mujeres que beben Brugal lo que se les puede pegar es un buen pescozón.