LA NOTICIA Y SU PESPUNTE

Una escena protagonizada por una caleña y el cantautor de bachata Romeo Santos en el concierto que realizó el artista en Cali el pasado 30 de noviembre, generó gran polémica en las redes sociales. 

Lina Naranjo, de 23 años de edad, asistió al concierto del excantante de la agrupación Aventura y fue escogida por el estadounidense para subir al escenario y a una cama que había en este. 

Pese a que se trata de un concierto que tuvo lugar hace unos días en la Plaza de Toros de Cañaveralejo, en Cali, el video publicado en Youtube y que protagonizan Romeo y la caleña suma casi 300 mil reproducciones. 

En este se aprecia como Romeo se acerca a Naranjo, le da uno que otro beso y le baila sensualmente mientras canta ‘Propuesta indecente’.

Sin embargo, el acto que más se ha sido criticado en redes sociales es que el artista y la joven se acostaron en una cama que hacía parte de la ambientación del show.

Tras la polémica, la caleña habló con una reconocida emisora radial nacional y explicó que el equipo de producción la buscó y le hizo firmar una especie de contrato en la que se pactó que “tenía que seducirlo, ser coqueta y dejarse llevar”, comprometiéndose además a no abandonar el escenario.

Ante las críticas, la joven aseguró que en el momento en que ‘El rey de la bachata’ y ella estaban en la cama no pasó nada, porque todo era parte del show. 

Incluso dijo que aunque no entiende las críticas de la gente, no volvería a participar en un espectáculo como ese porque “fue algo del momento” y ella es “muy niña de la casa”.

“Lo que hice fue dejarme llevar porque no podía dejar pasar una oportunidad de esas”, dijo Lina, a pesar de que señaló que es muy penosa.

La seguidora de Romeo aseguró que estaba acompañada en el concierto por unos amigos y que lo disfrutó en su totalidad, sin pensar que en las redes sociales se fuera a generar una racha de críticas.

Aclaró que no hubo besos y mucho menos sexo con Romeo Santos en la cama que fue puesta en tarima para la recreación de una escena. “Se trató de una actuación. Una actriz se besa con mucha gente, hace escenas y por eso no la tienen que ofender”, afirmó refiriéndose a duras críticas que ha recibido.

“Qué manera de darse a conocer. Yo ni sabía de ti. ¿Padres orgullosos?”, escribió @dayanarp82 

Y Lina se defiende: “Mis padres fueron a los primeros que les conté”, al indicar que ellos se sintieron orgullosos de las imágenes e incluso se reían de los comentarios negativos que le hacían. 

“Ojalá hubiera quedado con él, yo feliz”, comentó Lina, aclarando que no hubo contacto posterior con Santos aparte de su sensual acercamiento en tarima. 

Tampoco hay novio ofendido en esta historia. La propia Lina contó que novio como tal no tiene, está saliendo con alguien que la acompañó al concierto y a quien le pidió comprensión por su reacción al estar frente a su artista favorito. “Es mejor hacer las cosas de frente”, agregó.

Sin embargo, hay quienes creen que se armó todo un escándalo por nada. Como @adrianadiazh quien dijo: “¿En serio están tratando de p*** a la niña caleña que subió a la tarima en el concierto de Romeo Santos? país de mojigatos”.

(elpais.com.co)

La gente cree que cuando Romeo sube a escena a una muchacha del público para hacer el show del beso a la gordita, o ahora el de la simulación del sexo en una cama, arropado con una sábana, todo eso responde a una acción improvisada.

Nada más lejos de la verdad. Porque está  libreteado, preparado, programado, acordado, y las muchachas que suben al escenario, ya están bajo previo acuerdo y contrato, como lo expresa muy bien la caleña, a la que Romeo metió en la cama como parte del show.

Eso no es algo nuevo, pues el artista lo viene haciendo en sus presentaciones desde los Estados Unidos, como parte de una rutina.

Hasta agencias de prensa se han hecho eco del asunto, como. si fuera algo para escandalizarse.

Como bien dice el mensaje subido a las redes sociales, se comportan como un país de mojigatos.

Ahora bien, como se trata de una figura de una dimensión como la que posee Romeo en estos tiempos, dadas las críticas, el escarceo y los comentarios que está lavantando  la rutina más caliente que tiene su concierto, bueno sería que se tomara con pinzas la situación.

Que amarren bien su contrato para que de la acción no se derive algo que pueda luego perjudicar al artista.

Dicen que cada cabeza es un mundo, y en el negocio del espectáculo hay gente que asume que todo se vale.

Y "una cosa piensa el burro, y otro el que la apareja", dice un refrán de campo.

No hay que olvidar el escándalo que le hicieron a Leonardo Reyes Zapata (Chayanne)  percusionista de Aventura, cuando el grupo fue a Honduras, y lo acusaron de violar a una muchacha hija de una abogada, por lo cual permaneció varios días preso, y  se salvó "en tablita", gracias a la intervención del gobierno dominicano.

Contó Chayanne en esa ocasión que lo único que hizo fue permitirle a la muchacha que entrada a la habitación del hotel  donde estaban alojados, dizque "a bañarse", pero que no le hizo nada... el "pobrecito".

Pero, siguiendo con Romeo, y  las críticas que ha levantado su show en Cali, donde los mojigatos están protestando porque utilizó a la muchacha "como objeto sexual", y le están pidiendo que "mida su comportamiento", considerandolo "abusivo" y falta de respeto", según hemos leído, bien haría él y sus manejadores con tomar la debida precaución, porque en no todos los países y pueblos, la gente es "open mind", como dicen.