Están llegando las caretas

La máscara de Ernesto quirino Paulino no podía ser más siniestra y grotesca, pero además payasesca, porque estamos en carnaval y detras de la misma no solo se esconde el rostro de este vulgar delincuente, sino la comparsa que le acompaña haciendo causa común con sus bajezas. La verdad es que muchos de los que aspiran al poder lucen muy mal usando caretas como esta. Cuando la oposión política tiene que recurrir a gente tan detestable y repugnante, como este engendro del mal para combatir a un contrario, no hace más que poner al descubierto sus falencias, su falta de carácter, de argumentos, y de  figuras con  reciedumbre para echar la pelea. Al final de cuentas lo que están haciendo es convirtiendo en victima al doctor Leonel Fernández, dado el masivo repudio  que se ha generado en contra de  las acciones emprendidas por el capo Qurino y sus adlátares encubiertos.

 Las mejores caretas, porque son bien artesanales, son las de los estudiantes de la UASD que se movilizan, queman gomas, lanzan basura y apedrean a la policía, en protesta porque a las inscricpiones le aumentaron 20 pesos. Los infelices, son tan humildes, que no lo pueden pagar, mientras  si tienen para recargar sus teléfonos ceulares, beber cerveza en los bares de los alrededor, como también  "brincar la tablita" en un negocito clandestino que hay cerca de la Correa y Cidrón donde algunas muchachonas dan servicio "furtivo" a los estudiantes que se desesperan, porque tienen mucho tiempo0 "sin ver a Linda".

Unas caretas que ya se están fabricando, son las de quienes desfilarán por la alfombra roja del premio Soberano, donde tantos personajes procuran siempre su minuto de gloria. Algunos disfrazados de hadas madrina, otros  de reinas y  faraones con sus esclavos, de  Gatúbela...de muñeca de la Barbie con  todo y caja.
El carnaval de los premios está llegando, que coja cada quien su careta, porque pronto vendrán los anuncios de vestidos forrados con miles de cristales  de Swarovski, con canustillos de oro importados de la India, y los diseñadores haciendo sus amarres para que las mujeres que visten queden entre las diez mejores, regando para ello  sus "boronitas" a diestra y siniestra...¡Si!, porque "no money, no mami". No olviden que la farándula, según la definición, es "la profesión de los farsantes"...
En días como  estos los "templos" se desangran con las chapeadoras rezanderas que comienzan a orar por el dinero de los vestidos que lucirán en la alfombra roja del Soberano. 
Se escuchan ya las campanitas gregorianas y el anuncio de: "Señoras, señores, el espectáculo va a comenzar". 
Son las caretas...las caretas que vienen bajando, que coja cada quien la suya.