Un domingo cualquiera...

Lo mejor que pudieron haber hecho las comunicadoras Nikauly de la Mota y Georgina Duluc, fue abandonar la idea de convertirse en cantantes, como en algún momento intentaron.

Probablemente si hubiesen persistido en el intento, estuvieran a estas alturas arrastrando una penosa situación en lo económico, por todo el dinero invertido y perdido, y cargando con una frustración de esas que acompañan al individuo para toda la vida. Son muchos los que, sin saber,  se montan en el caballo de Don quijote sin ninguna armadura, a luchar contra molinos de vientos que hoy día son digitalizasdos y cibernéticos, para los cuales hay que protegerse con un antivirus, para que no perder el disco duro, y los datos contenidos en la memoria Ram. 

El brunch de los domingos es sencillamente formidable, porque lo mismo te encuentras con unas lonjas de queso manchego, de jamón serrano, un croissant, una taza de te, un zumo de naranjas, como también un ceviche de corvina y un sorbete de fresas. Todo un deleite...Hay detalles no incluidos en el menú, que a veces van por la casa, como pueden ver aquí. En algunos establecimientos te mandan un digestivo cortesía de la casa...Vean los "complemento" que en este lugar mandan...

Para las elecciones que vienen se van a integrar a las campañas más cronistas de arte que nunca...

Parece que se acabó la pasividad.

Los únicos de los cronistas que siempre estuvieron claros, son Napoleón Beras, y Rafael Ovalles, en la época en que estaba dedicados a la farándula.

Napoleón con el PRD, que cuando Hipólito fue presidente de la Comisión Nacional de Espectáculos Públicos, y Ovalles con el PLD, en ciuyo gobierno trabajó en el palacio y actualmente es funcionario público.

Esta vez sonaron las campañas, y todo el mundo está entrando al ring.

Unos con Francisco Javier, otros con Amable Aristy, los que están con Leonel, con Danilo, con Hipólito y Miguel Vargas, y 
Reinaldo Pared.
Algunos de ellos han decido jugarsela en otro terreno, pues dicen que en el de la farándula se hala mucho aire...
Tienen un espejo de referencia, de comunicadores que migraron a otras áreas y les ha ido super bien, como Juan TH, Euri Cabral, y Cristhian Jiménez.
Faltan recursos, pero más que nada ingenio y creatividad

Edilenia Tactuk, la mejor productora de programas en el área de entretenimiento de la televisión dominicana, realizadora de grandes espectáculos artísticos, y de eventos multitudinarios partidos políticos para cierre de campañas, dijo recientemente en una entrevista que el problema de la televisión dominicana radica en la falta de recursos para desarrollar programas de amplio espectro y aceptación.

Parecería como si la querida Edilenia se sintiera abrumada por los recursos que la televisión internacional,  que nos llega por cable, despliegan en sus programas.

Y no negamos que se necesitan recursos en una televisión donde los canales no quieren invertir, con excepción de Telemicro, el único que no escatima esfuerzo ni recursos en sus eventos, como se verifica en el hecho, de que a la misma Edilenia, cuando estaba en otro canal, la contrataban para producir los eventos más grandes de la televisora, con una carta abierta que nadie más la da.

Está claro que nadie aquí se puede montar en el esquema de Univisión, que es la mayor referencia que aquí tenemos de producción de televisión latina.

Pero si debemos decirle a Edilenia algo que no se puede obviar al momento de señalar posibles culpables.  En la televisión hay un problema mayor que la falta de recursos.
Es la falta de creatividad de muchos de los que están al frente de programas y canales.

De nada sirven los recursos, si quienes los manejan no saben qué hacer con ellos.
En cambio, si hay ingenio, talento, inventiva, creatividad, con lo se tiene se puede trabajar y lograr impacto y trascendencia.

La cantante mexicana Yuri, en plena efervescencia, en una gira que hizo al país, siendo jovencita, su fue para el sector de Villa Juana en la parte alta de la capital a comer frituras, y a "camellar" por las calles del barrio, como una ciudadana cualquiera escoltada por el fallecido cronista de arte Victor Muñoz. Todo un derroche de sencillez en esos tiempos.

José José es otro que ha hecho historias, en su época de mayores desarreglos, con verdaderas bemberrias de tequila hasta la amanezca.

Cuando se montó el Espectáculo Centroamericano y del Caribe  en los años 70 con José José, Sophy, Fausto Rey salía de noche a parrandear con los amigos, y cuando llegaba al hotel Hispaniola de madrugda, tragueado, se presentaba a la puerta de la habitación de la Sophy  a cantar serenata con su guitarra y a tocarle la puerta, despertando  a los demás huéspedes.
La Sophy se quejaba de que El Príncipe no la dejaba dormir... 

Otra que dio agua de beber fue Olga Breskin, la Venus del Violín, cuando venía contratada para actuar en el El Maunaloa. 
Viajaba acompañada de su madre, supuestamente para "cuidarla", cuando en verdad de ellas dos era que había que cuidarse...

El empresario Edmon Elías que la trajo al Maunaloa al parecer "no se cuidó", pues se propuso conquistar a la portentosa venus mexicana.
Se cuenta que alquiló una habitación al frente de la que ocupaba la Breskin en el hotel, y que la llenaba de regalos y halagos.

Hace dos años Olga Breskin confesó en una entrevista en México que en esa época era lo que hoy se conoce como una chapeadora.

Una que hizo travesuras fue Alejandra Guzmán cuando vino a un premio Casandra.
Se le recuerda por el desenfreno que exhibió en un "after party" que hizo la cervecería en la discoteca del hotel Jaragua, bailando con una pareja de ocasión con movimientos lascivos y eróticos pegada a las paredes sin importarle lo que dijeran.
Al día siguiente, cuando era llevada al aeropuerto para su regreso a México, hizo que se abortara el traslado, para que la llevaran a  Puerto Plata, con lo que su retorno se trastornó de fecha.

Niurka Marcos es quizás la figura más escandalosas de todas las que han pisado nuestra tierra.
Cuando se quedó a vivir aquí, al llegar desde Cuba en una revista artística, lo primero que hizo fue relacionarse con figuras famosas, entre ellos el fenecido merenguero Richi Ricardo, a quien le decían en esa época "El Potro", por su parecido con Johnny Ventura.
La inquieta Niurka  vivió más de una aventura con figuras famosas del merengue. Más que nada procurando lograr su pase a a Miami, que era su meta, lo cual finalmente consiguió...
Ella y otro famoso salsero cubano que vivió en el país, le deben al merenguero criollo su llegada a Miami.