El arte de chuparse el dedo gordo del pie derecho...

El fin justifica los medios, pero..

Dicen que "el fin justifica los medios", es una frase que se le atribuye a Nicolás Maquiavelo, aun cuando no hay evidencia de que la haya dicho o escrito. Pero se la han pegado a él, talvez, por lo "hijoeputa" que  fue en su pensamiento y comportamiento, el filósofo político italiano.
Significa que cuando el objetivo final es importante, cualquier medio para lograrlo es válido.
Y claro, cuando se piensan y se actúa así, se contradicen y contravienen valores éticos.

Hay un cantante en Nueva York llamado J. Martin dueño de supermercados y de negocios que en los últimos tiempos aparece en todas las carteleras artísticas de los eventos que se presentan en el teatro United Palace.
Ya se ha dicho  que se debe al hecho de que le compra a los organizadores de los espectáculos una cantidad apreciable de boletas que distribuye y vende a su vez entre los empleados de sus establecimientos.

Es decir, le asegura la venta a quienes montan "shows" de una parte de la boletería por anticipado, y eso lo hace a cambio de que lo dejen actuar en el mismo.
Un negocio de trueque, o de "dando y dando", que a simple vista no tiene nada de malo.
Porque si miramos en otras esferas del ambiente cultural o artístico, son muchos los intrercambimos y trastueques que también se hacen.
Gente que escribe un libro, y en la primera edición se agota de inmediato.
¿Por qué tan rápido, como si fuera un best seller?.
Sencillamente por que los venden por centenares a ministerios, empresas y oficinas públicas que se los compran por compromisos políticos, amistosos o familiares.
Libros que luego esas instituciones los regalan entre sus empleados, pero que el escritor cobra su buen cheque.

Igual ocurre con ciertos jorocones de la música, sobre todo figuras del merengue ligados a la política, que para Navidad hacen ediciones especiales de sus éxitos, y sin tener que enviarlas a las tiendas de discos, los colocan por centenares en bancos, y ministerios del gobierno que los adquiren por paquete, para a su vez distribuirlos en sus canastas y regalos navideños.
Un buen "chanchito"  el que se ganan algunos veteranos merengueros que hacen eso cada año, para buscarse la "moña" de la navidad, lo cual está muy bien, pues al dinero a veces hay que perseguirlo, rodearlo y atraparlo, porque anda "prófugo".

Como se ve, J. Martin no es el único...Y está en todo su derecho de procurar estar en todos los conciertos de teatro empleando su método de trastueque.
No olvidando el hecho de que la "fiebre no está en la sábana", y que la mera exposición junto a los grandes y famosos no asegura el éxito.
Si le público no le "abre la llave, no pasa", por más que se tire al escenario, brinque y se despatille...
El carisma en todo caso es determinante.
Por eso se verá que alguien sin sus recursos ni trastueques, le llegará más facilmente a la gente, habiendo salido ayer, y sin apariciones forzadas en el teatro United Plátano, como le dicen a esa sala, por el hecho de que los dominicanos la han hecho suya, y presentan en la misma todos sus conciertos.

Lo que si no se le puede comprar a J. Martin es la pretensión de hacer creer que por presentarse en todos los conciertos que se montan en United Plátano ya está pegado, como se anda diciendo en una nota de prensa para tontos que se ha puesto a circular en los medios.
Se trata de una estrategia muy infeliz, pues se incurre con ello en el error de caer en la lista de artistas que solo estan pegados en notas de prensa.
Nadie es tonto para que le doren esa píldora y tragársela.
Aunque después de todo el filo del hacha a donde en todo caso debería enfilarse es hacia los promotores que montan carteleras artísticas donde promueven figuras emergentes o desconocidas junto a ya famosas,  solo por conveniencia para asegurarse la venta de boletas.
Se entiende que se le falta con ello el respeto al público, tras la excusa de que se le está dando apoyo al nuevo talento.
Pero, en ese sector sí que no hay escrúpulos, donde si se cumple a cabalidad aquello de que "el fin justifica los medios".